No es la primera vez que suenan las negociaciones o el acercamiento de Microsoft con la empresa Valve, responsable de Steam. Desde Age of Empires II, en 1999, o su remasterización en 2003, la presencia de Microsoft ha sido residual, ausentándose sobre todo en grandes producciones. Ahora Microsoft considera en su futuro la explotación de los videojuegos en PC con Windows 10, donde Phil Spencer habría reconocido, lo que es obvio, que Steam es hoy día, la plataforma lider en la venta de juegos de PC, y por ello, se pronuncia a favor del regreso de Microsoft a Steam.
Con esto, «no creo que Valve esté sufriendo por no tener en su catálogo los juegos de Microsoft, porque lo están haciendo muy bien», declara Spencer, asegurando que «llevaremos los juegos a Steam otra vez». En parte, esto puede deberse a la poca consistencia que está teniendo la llegada de los primeros títulos importantes a Windows 10, a través de la tienda de Windows. Y es que a estas alturas, juegos como Gears of War: Ultimate Collection, Quantum Break, Killer Insinct o Forza Motorsport 6: Apex, podrían tener un mayor público si se distribuyesen a través de Steam. No obstante, no se han concretado, por ahora, ningún juego para llegar a Steam.
Es más, considerando el futuro, Xbox Play Anywhere, el esfuerzo de Microsoft por crear un ecosistema con millones de usuarios, podría verse claramente potenciado por esta decisión. Por ahora, los juegos principales que copan la tienda de Windows, son juegos que se desarrollan a vía Universal Windows Platform, no viéndose impedidos por las restricciones técnicas que la Xbox App ofrece y que si ha afectado a los juegos procedentes de Xbox One. Obviamente, estas carencias se están intentando solucionar y dimos a conocer que la esperada Windows 10 Anniversary Update ofrecerá soluciones, así como mejoras para poder usar juegos Win32 procedentes de la tienda de Steam.
Todo esto puede derivar en más acuerdos futuros, pues hay que tener en cuenta lo que el futuro de ese ecosistema puede suponer. Con Steam como principal proveedor digital de juegos, aunar esfuerzos puede ser un incentivo importante para los jugadores de PC, pero también podría ofrecer otro tipo de ventajas. La realidad, es que Microsoft y Valve están llegando a muchos puntos comunes y en el fondo, lo que parece prevalecer es potenciar Windows 10 como plataforma de juego, algo que hoy día está todavía un poco verde, aprovechando el fracaso rotundo que ha supuesto para Valve su conato de acaparar hardwares cerrados, las Steam Machines.
Windows 10 sigue dando pasos para mejorar esta experiencia, algo que en un futuro puede afectar a ese ecosistema Xbox que están construyendo en torno a diferentes hardwares, una idea que gusta en Valve y que podría convertirse en un importante aliado. Habrá que esperar a que lleguen más detalles y posibles sorpresas.