«A los jugadores de siempre y a quienes hoy descubrís Final Fantasy»
Diez años hemos estado esperando una nueva entrega de una de las sagas más emblemáticas del mundo de los videojuegos. Como un gran reserva ya se ha descorchado Final Fantasy XV, la nueva entrega de la saga de fantasía que te llevará al reino de Eos en el que ha ocurrido una terrible injusticia. De la mano de Noctis, principe de Lucis, recorreremos los preciosos escenarios diseñados para el juego y nos adentraremos en una aventura con una enorme carga emotiva, una narrativa cuidada al máximo y cargada de sorpresas para todos los gustos. Además, Final Fantasy XV se ha renovado y se ha adaptado a los nuevos tiempos con un sistema de combate que le ha sentado más que bien. Sin más rodeos vamos a comenzar profundizando en este análisis de Final Fantasy XV para Xbox One.
Una historia épica, de grandeza y con corazón
Final Fantasy XV guarda toda la esencia que caracteriza a la saga, la grandeza es palpable en este título, en su manera de narrarnos la historia y en la inmersión absoluta de la que disfrutaremos. Es curioso, pocos títulos me han absorbido tanto y es que, pasaremos horas en el vasto mundo y no nos daremos cuenta. Esto se debe a que la exploración es interesante, los escenarios están llenos de detalle y de vida, y las misiones secundarias no son una pérdida de tiempo. Hecho importante ya que últimamente, salvo contadas excepciones, las misiones secundarias son puro relleno. En este título las cruzadas en las que nos embarquemos tienen recompensa, nos harán crecer en experiencia, conseguir valiosos objetos, descubrir maravillas del mundo creado por Square Enix y además, encontrarás diversión en ellas, algunas son una locura y otras más serias. Merece la pena embarcarse en el territorio secundario de Final Fantasy XV, resulta enriquecedor y no malgastaremos nuestro tiempo. Además, será crucial tener un buen nivel para encarar las misiones finales con éxito y estas secundarias nos ayudarán con esa tarea. Existen cientos de misiones secundarias que hacer, al principio las empezaremos con ganas aunque hay tantas que es muy posible que nos sintamos recaderos y las dejemos a un lado porque nos resulte repetitivo.
La historia principal del juego es toda una oda que va «in crescendo», de más a menos no decae en ningún momento. La trama es un intrincado enredo de sucesos que se irán desvelando poco a poco pero sin pausa. La narrativa sabe mantenerte interesado, sabe hacerte empatizar y mantenerte pegado a la pantalla y al mando para descubrir qué está pasando pero, sobre todo, para arreglar el problema. Mientras juegas a Final Fantasy XV te sientes uno más, sientes que formas parte de los sucesos y quieres solucionarlos. Todo un acierto por parte de Square Enix este guión que hará que soltemos alguna palabra de rabia o de frustración y lágrimas también, para qué negarlo, mientras pasamos tiempo por el reino de Noctis. Un apunte, es importante ver antes de jugar la película que actúa como precuela de los sucesos del juego, Kingsglaive: Final Fantasy XV, de esta manera entenderemos muchas cosas sobre los personajes y los hechos en sí. El largometraje dura unas dos horas y es el complemento perfecto para disfrutar al máximo de la experiencia, merece la pena dedicarle un tiempo.
Los personajes del juego son una de las grandes bazas que se encuentran en esta entrega. El grupo protagónico es tan entrañable y carismático que empatizar y sentirte parte de ellos no costará trabajo. El príncipe Noctis el más “inexperto” tendrá que crecer para convertirse en el rey que se espera de él, Prompto, es el gracioso de la compañía, Gladiolus el protector e Ignis, aquél que todo lo sabe. Cada uno tiene unos rasgos de personalidad muy marcados y serán el complemento perfecto del otro, las conversaciones que tienen a lo largo de la aventura, en cualquier momento, son dignas de toda nuestra atención. Además de este grupo protagónico también hay una gran cantidad de personajes con unos diseños absolutamente brutales cargados de toda la esencia de Final Fantasy. En algunos momentos nos descubriremos absortos por la cuidada ambientación
Un sistema de combate para tiempos más civilizados
La saga Final Fantasy cuenta con una legión de seguidores inmensa alrededor del mundo. Cambiar y arriesgar es peligroso cuando te sigue tanta gente ya que corres el riesgo de que algunos abandonen el barco, sin embargo, también se apuesta por agregar nuevo público a tu propuesta. Es algo que le ha pasado a este Final Fantasy XV, ha cambiado su típico sistema de combate por turnos habitual en los JRPG y se ha “occidentalizado” para ofrecer versatilidad y fluidez a la hora de la pelea. Comparado con las mecánicas de Kingdom Hearts, no queda tan lejos de parecerse, sin embargo incorpora elementos muy interesantes a la hora de enfrentarse al enemigo.
Sin embargo, ya se dice al meter el disco en la consola, es un juego para los más fieles amantes de la saga y también para que lo disfruten las nuevas generaciones. Final Fantasy lleva muchos años en el mercado, renovarse es necesario para no envejecer mal y seguir avanzando. El cambio le ha sentado de maravilla y todos, veteranos y nuevos, disfrutarán de esta épica aventura.
El sistema de combate es en tiempo real, muy versátil, cómodo e intuitivo. Da gusto plantarse frente al enemigo y partirse la cara con él. Tenemos cuatro ranuras, esto significa que podemos llevar cuatro armas o magias. Según avancemos en la historia podremos optar a rellenar nuestras casillas con un arsenal mejorado, además si nos dedicamos a explorar y a realizar misiones secundarias también conseguiremos interesantes incrementos de potencia para nuestro equipo.
El menú de pausa del título resulta más que interesante, está plagado de cosas que tendremos que tener en cuenta para tener éxito en la misión de Noctis. En primer lugar se presentan los personajes, con su nivel, bagaje, vitalidad máxima, en definitiva todas las características que debemos conocer y tener en cuenta a la hora de mejorar las habilidades y el equipo.
En el mapa podremos echar un vistazo de manera rápida a todas las posibilidades que ofrece el reino. Los santuarios son lugares en los que se nos permitirá descansar si la noche se cierne sobre nosotros ya que demoniacas criaturas reinan en esa franja horaria y harán nuestra travesía imposible. Mientras descansamos en el santuario, Ignis preparará ricas recetas para que recuperemos fuerzas y se acumulará nuestra experiencia para que podamos intercambiarla por habilidades. Esto también pasa si descansamos en un hotel o posada, la diferencia es que tendremos que pagar pero, a cambio, ganaremos puntos de experiencia por ello. Quédate con esto, los restaurantes son puntos vitales para el desarrollo de la aventura y de los personajes, en ellos encontraremos valiosa información sobre tesoros o batidas de caza. Otro de los puntos del mapa nos marcarán las misiones principales y secundarias, las mazmorras, el alquiler de chocobos, la ubicación de nuestro coche o las zonas de pesca. Conocer el mapa es vital para tener éxito.
Otro de los puntos del menú pausa nos mostrará las misiones que tenemos pendientes con el nivel recomendado para salir victoriosos, un consejo, no te embarques en una de nivel demasiado alto o saldrás mal parado. En el menú de equipo se muestran las armas disponibles y los accesorios que llevemos, muy importantes para cada batalla.
El árbol de habilidades es enorme y está muy bien implementado, es conveniente no centrarse solo en los dones de Noctis ya que nuestros compañeros de equipo tendrán que desarrollar sus habilidades para ayudarnos en batalla, en ocasiones es vital que intervengan, no se deben descuidar. Este punto está muy cuidado y ofrece cientos de posibilidades, el esquema es muy visual y no será complicado elegir lo que queremos mejorar.
Nuestros acompañantes tiene aficiones que se mejorarán según las pongan en práctica. Mejorar estas habilidades nos bonificará con ciertas ventajas a la hora del combate. El apartado «Magia» es de los más interesantes, podremos hacer combinaciones imposibles para crear objetos letales o de curación. La profundidad que hay detrás del gameplay es sublime y nos hará tener en cuenta muchas cosas para continuar la aventura.
Riqueza secundaria, no relleno
A parte de la historia principal podremos perdernos por el mundo de Final Fantasy XV, buscando ranas, derrotando a colosales criaturas, haciendo fotos con Prompto o participando en carreras de chocobos. Todo lo que puedas imaginar puedes hacerlo en el mapa de este título. Zonas de pesca, caza o creación de recetas de la mano de Ignis, la parte secundaria del juego es algo que Square Enix ha sabido mimar y darle todo su cariño para que no sintamos que el mapa está vacío o relleno sin motivo. Un punto muy a su favor ya que a día de hoy es difícil encontrar algo que no esté puesto de adorno y no para que aporte contenido del juego de base.
Las acciones están entrelazadas, si pescas aumentarás las habilidades de Noctis y conseguirás ingredientes para que Ignis pueda crear nuevas recetas y desarrollarse. La riqueza es palpable, sentirás que el tiempo pasa volado en el reino de Eos haciendo cualquier tarea que encuentres por el mapa.
Una pega que he encontrado a lo largo de mis horas por las carreteras del reino es el Regalia. El coche real es muy bonito, sí, pero viajar en él es una auténtica pesadez. Tendremos la opción de que nos lleven en viaje automático o conducirlo. Si no lo llevamos nos aburriremos, a pesar de las conversaciones del grupo, si lo llevamos será desesperante. No encontraremos nada en nuestra travesía y puede que quieras dedicar el tiempo a hacer otras cosas mientras los protagonistas viajan. El coche es lento, sus movimientos no son nada naturales y es tedioso ir de un lugar a otro de esa manera. Está claro que Final Fantasy XV no es un juego de conducción pero no habría estado de más que esta característica hubiera estado mejor implementada. Siempre nos queda pagar 10 guiles para hacer el viaje rápido y ahorrarnos la carretera aunque tendremos que enfrentarnos a un tiempo de carga.
Apartado técnico con algunos problemas
Por lo general el apartado técnico de Final Fantasy XV es más que aceptable en su versión de Xbox One. Hay estabilidad en la tasa de frames y no he experimentado caídas que impidan que la experiencia de juego sea satisfactoria. La pega viene ahora, en ocasiones se divisan dientes de sierra sobre todo en las texturas de los personajes. Otro de los puntos negativos viene al empezar un capítulo, a parte de que las cargas son un tanto pesadas, al iniciar el episodio el juego «ranquea» y parece que se va a parar en cualquier momento. Este problema se solventa con el paso de los segundos regresando a la estabilidad.
El apartado sonoro es sublime. La banda sonora es una maravilla y nos hará revivir las entregas pasadas de la saga, además las en alguna ocasión sonarán las versiones y composiciones de Florence Welch, líder de la banda británica Florence & The Machine. Los efectos de sonido son de calidad y nos meten de lleno en el combate, o en el ambiente en el que nos encontremos. El diseño de escenarios es impecable, todo lleno de detalle, color y vida. Las criaturas son mastodónticas y con un cuidado dibujado para aportar variedad a la causa. Todo lo que podemos ver está implementado con sumo cuidado para que resulte natural que esté ahí.
Conclusiones del análisis de Final Fantasy XV
En definitiva, Final Fantasy XV es uno de los mejores juegos de este año 2016 y un imprescindible que debes jugar seas o no fan de la saga. Aporta un nuevo sistema de combate que hace apto para casi todos los públicos, su historia principal tiene una duración de unas 20-25 horas pero si nos quedamos paseando por su zona secundaria podríamos llegar a las 90-100 horas fácilmente. La historia está llena de epicidad, carisma y evoca las grandes historias de la saga. Es un gran juego por sí mismo y un gran juego como parte de una franquicia que trajo algo más a los videojuegos. Puedes hacerte con Final Fantasy XV en la store oficial de Xbox One por 69,99 euros.