Una de las mayores preocupaciones que pueden tener aquellos usuarios que no van a requerir de todo lo necesario para jugar a 4K, es que las actualizaciones que harán llegar para los juegos compatibles con las mejoras llenen su disco duro de gigas que no necesitan. En cierto modo, esta alarma saltó cuando se dio a conocer que Forza Motorsport 7 pesaría 100Gb, algo que solo afecta a la versión que se ejecutará en Xbox One X. Según se ha dado a conocer, la gestión de las descargas será realizada por cada una de las consolas, donde los usuarios que tengan una Xbox One no tendrán acceso a las actualizaciones que optimizan los juegos en Xbox One X, incluso, en Xbox One S.
Según preguntó el medio a Microsoft, estos respondieron que «con el lanzamiento de Xbox One X, nuestra intención para la llegada de este contenido es que cada consola descargue el contenido que necesite», de forma que «independientemente de la televisión que se use, Xbox One X descargará los contenidos necesarios para jugar a 4k y Xbox One S descargará los necesarios para 1080p». De este modo, las anteriores máquinas de Microsoft podrán seguir funcionando como lo han hecho hasta ahora. Puede plantearse un pequeño conflicto con aquellos usuarios que vayan a adquirir Xbox One X y no vayan a hacer uso de una televisión 4K, pero todo dependerá de que pongan algún tipo de solución a este aspecto, ya que hasta la fecha, se ha advertido que Xbox One X está más dirigida al público que si hará uso de esta resolución.
Pero precisamente ahí, Microsoft ha dejado libertad a las desarrolladoras para implementar lo que requieran para estos modelos gracias a herramientas optimizadas. Herramientas que ya han dado cuenta de mejoras aplicables a Xbox One S gracias a la llegada de Xbox One X. «Como parte de nuestra preparación para los que desarrollen en Xbox One X, se ha puesto a su disposición una característica que les dará gran flexibilidad cuando se trata de diferenciar para que consola se ejecuta», donde además «los desarrolladores tienen opciones cuando se trata de activos de idioma, lo que, dependiendo del título, puede reducir drásticamente la huella de la instalación».
Y hay que dejar constancia de que esta evolución y desarrollo de las herramientas no ha cesado en Microsoft, donde aseguran que «habrá más características para los usuarios finales» en los próximos meses. Resulta interesante ver como Microsoft se ha implicado con Xbox One X, la consola más potente y que ofrece grandes posibilidades a los desarrollados, que hasta la fecha, solo han dedicado palabras de elogio.
Xbox One X llegará el 7 de noviembre por 499€.