Después de dar un completo repaso a las primeras aventuras del exigente Ninja Gaiden, uno de los guerreros más letales de la primera Xbox, ahora toca de nuevo cambiar completamente de tercio para centrarnos en un héroe algo atípico que hará temblar desde la oscuridad a todo enemigo que se aprecie. Hablamos sin duda alguna de Riddick, concretamente su primera gran fuga en consolas, que llegó en un principio de forma exclusiva en la consola de los de Redmond.
En una época en la que los juegos en primera persona empezaban a despuntar en consola, gracias en gran parte al lanzamiento de los primeros títulos de la saga Halo, la mítica desarrolladora Starbreeze Studios nos ofreció el excelente videojuego de acción y sigilo titulado ‘Las Crónicas de Riddick: Fuga de Butcher Bay’ en el que como su propio nombre indica, debíamos escapar de una prisión de alta seguridad en medio de un planeta desértico, algo que ninguno había conseguido hasta ahora.
A muchos de nosotros quizás nos suene el misterioso personaje Riddick por las películas lanzadas hasta la fecha, y es que la primera aparición de este fue en la película de acción y terror ‘Pitch Black’ que sirve como comienzo a las aventuras del personaje protagonizado por Vin Diesel. En ‘Pitch Black’, los tripulantes de la nave Hunter-Gratzner sufren un grave accidente producido por el choque de un cometa en el casco de esta, haciéndoles estrellar en un planeta desconocido habitado por extrañas y letales criaturas que solo aparecen en la oscuridad. Por si todo esto no fuera poco, entre los tripulantes de la nave se encuentra un peligroso convicto que iba a ser llevado a una cárcel de alta seguridad, dicho reo como podrás suponer es Riddick, un asesino que modificó sus ojos para poder ver en la oscuras, algo que será de vital importancia para ayudar a los pocos supervivientes que quedan a escapar de un planeta asolado por estas criaturas nocturnas.
Debido al gran éxito que tuvo dicha película, la productora Universal Studios decidió apostar por una segunda parte denominada ‘Las Crónicas de Riddick’ pero antes, encomendó a la desarrolladora sueca Starbreeze Studios el que sería el primer título de la saga que serviría como precuela a las películas ante mencionadas. El éxito tanto de la crítica como de los propios jugadores fue rotundo, y es que la fuga de Butcher Bay supuso un nuevo giro a los juegos en primera persona en el que se añadían grandes toques de sigilo para acabar con los carceleros y una historia a la altura de lo que se puede llegar a esperar de un título de estas características, donde conocíamos el origen de esta visión nocturna. El éxito fue tal que unos años después, la editora sueca volvió con una segunda entrega, esta vez de forma multiplataforma, en la que se incluía de forma complementaria una remasterización de la primera parte, con algunos añadidos como una notable mejora gráfica. A pesar de ello, Las Crónicas de Riddick: Fuga de Butcher Bay fue en su lanzamiento, una demostración del enorme potencial de la Xbox original, y es que el apartado gráfico era realmente abrumador si lo comparamos con otros títulos de la misma época, esto unido a su interesante historia y sus divertidas mecánicas jugables, pocos fallos se le podían sacar a este juego, teniendo en cuenta que contaba con una historia que se tornaba algo corta para lo que se podría esperar de él.
No son pocos los grandes lanzamientos que tuvo la primera Xbox, tales como el comienzo de la saga Forza, Halo, Fable y otras muchas franquicias que a día de hoy siguen dando mucho que hablar, y aún así, Las Crónicas de Riddick: Fuga de Butcher Bay fue sin duda uno de nuestros favoritos por ofrecernos uno de los mejores juegos de acción y sigilo de esta generación que cualquier jugador no debería perderse bajo ningún concepto y mucho menos si aún disfruta con las películas protagonizadas por Vin Diesel.