El lanzamiento de Xbox One ha sido posiblemente uno de los más polémicos que se recuerdan. Las políticas iniciales un tanto extremas y los cambios radicales de dirección posteriores han empañado en cierto modo algunos aspectos de la consola. Se ha discutido largo y tendido sobre la resolución, los fps, Kinect, y demás; pero existen detalles que han pasado desapercibidos o que no han tenido la atención que se merecen.
El objetivo de este artículo es servir como anexo de información a aquellos que tienen dudas sobre si comprar o no la máquina de Microsoft, tocando temas que sólo se pasan de refilón en otros medios. No se trata de una guía de compra, sino de un empujoncito para aquellos jugones que todavía no se han convencido de las bondades de la consola de Microsoft.
MATERIALES Y MANDO
Sí, no lo voy a negar, Xbox One es una consola considerablemente grande, y eso lo sabe todo el mundo a estas alturas.
Sin embargo, poca gente ha reparado en la calidad de los materiales con los que está construida Xbox One, así como la construcción en sí. Desde el momento en el que desempaquetas tu consola, sabes perfectamente que estás ante un producto de muy buena calidad. Los diferentes materiales cristalinos y mates son perfectos para colocar en cualquier salón sin despuntar estrepitosamente. Quizás para alguno esto sea algo nimio, pero somos muchos los que valoramos una estética elegante que no rompa con la habitación en la que se encuentra.
Igualmente esto se aplica al mando. La enorme mayoría de jugadores no prestan atención al nuevo mando de Xbox One porque creen que se trata simplemente de uno de Xbox 360 con pequeños retoques. Y, pese a que de un vistazo puede parecer que sí, estamos en realidad ante el que es para mí el mejor mando que ha existido jamás, como lo fue en su día el de Xbox 360.
Se trata de un paso más allá en términos de ergonomía, con una forma esculpida para encajar en tu mano y un peso medido y equilibrado con precisión. Además, se ha mejorado la cruceta enormemente para los juegos de lucha, así como la inclusión de vibración en los gatillos, excelente para los de conducción. Los sticks han sido reducidos en tamaño y han ganado una precisión nunca antes vista en un mando. Por último, el consumo de energía es tan reducido que unas pilas nos durarán semanas enteras.
El resultado es EL mando. Cuando vuelvas a jugar a otras consolas después de estar con Xbox One notarás lo que Microsoft ha logrado en términos de control. Por suerte hay drivers para PC, así tu sufrimiento será menor.
COMPARTIR JUEGOS
A pesar de que una gran parte de los usuarios saben que Microsoft se retractó, quitando trabas al mercado de segunda mano, existen todavía potenciales compradores que no tienen claro cómo va el tema en Xbox One.
Actualmente, en cuanto a juegos físicos, el sistema es el mismo que en cualquier otra consola. Se pueden prestar los juegos, vender y comprar de segunda mano.
Sin embargo, lo verdaderamente interesante es en el panorama digital. Estableciendo como consola principal la de un amigo, podremos compartir toda nuestra biblioteca y ahorrarnos unos jugosos euros. Incluso con que sólo una de las personas tenga Xbox Live Gold se nos aplicará a los dos, una característica especialmente beneficiosa para los que no son de multijugador pero quieren probarlo de vez en cuando.
Pero ahí no queda la cosa, ya que ahora podremos comprar en cualquier bazar sin necesidad de cambiar la región en la consola, directamente desde la página web de Xbox. De esta forma, la conversión a dólares hace que un juego de 60€ nos salga por unos 45€. Y como también se pueden compartir, las novedades salen a poco más de veinte euros por cabeza, un chollazo.
XBOX LIVE, GAMES WITH GOLD Y REBAJAS
Existe un cierto sentimiento de animadversión hacia Xbox Live Gold. Una gran parte de los usuarios ven con malos ojos el hecho de que te cobren una cuota por jugar online, cuando muchas veces la conexión funciona igual que en otras plataformas de la competencia. Este sentimiento de estafa se agudizó aún más cuando Sony anunció Playstation Plus, un servicio por el que recibes varios juegos mensuales mediante una cuota -menor que Xbox Live Gold-.
Microsoft, consciente de la situación, se sacó Games with Gold de la manga, que se trataba de un servicio de parecidas características. La diferencia principal es que los títulos eran tuyos para siempre, y no sólo mientras estabas suscrito. Sin embargo, la compañía de Redmond decidió cambiar el sistema y establecer un servicio equivalente a PS+, añadiendo también títulos a Xbox One. De esta forma, cada mes tendremos un par de juegos para Xbox 360 y Xbox One, uno por quincena.
Además, el número de servidores dedicados para Xbox One se ha aumentado hasta 300.000, una cifra bastante considerable que seguro hará las delicias de los más puntillistas con el lag.
En cuanto a las rebajas, la PS Store empezó muy fuerte con diferentes promociones navideñas y veraniegas, haciendo que los precios del Marketplace quedaran obsoletos. Una vez más, hay que reconocer a Microsoft su capacidad de reacción, con unas rebajas muy apetecibles en Xbox 360. En cuanto a One, su escaso catálogo debido a su reciente salida han condicionado la publicación de ofertas, aunque de vez en cuando nos sorprendemos con juegos como Titanfall a precio reducido.
ESTUDIOS FIRST PARTY Y GOLPE DE TALONARIO
Otra de las pegas que la gente achaca a Xbox es su falta de estudios internos. Así como Sony tiene a Naughty Dog, Santa Monica o Quantic Dream; Microsoft cuenta también con estudios de calidad como Remedy, Black Tusk, 343, Turn 10, Lionhead, Rare y más.
Pero en lo que mucha gente no cae es en que Microsoft es una empresa muchísimo más grande y poderosa que las de la competencia, y eso se traduce en la cantidad de inversiones que puede realizar en contenido exclusivo. No hablamos sólo de DLC, en lo que destaca también por exclusividades temporales en títulos como Call of Duty, sino de auténticos golpes de talonario hacia empresas grandes de la industria.
Así, gracias a la billetera de Microsoft, Xbox One cuenta ahora mismo con Ryse -Crytek-, Titanfall -Respawn-, Sunset Overdrive -Insomniac- y Scalebound -Platinum Games-.
Por tanto, el mensaje que quiero transmitir es que Xbox One tiene una compañía detrás que puede permitirse financiar a diferentes estudios, creando un catálogo variado en géneros y sagas.
PRECIO
Quizá el gran caballo de batalla de Xbox One es haber empezado siendo más cara que la competencia, con 100€ de diferencia. Ahora mismo también contamos con un pack a 400€ sin Kinect, igualando a lo que ofrece Sony con Playstation 4.
Sin embargo, esto no es así del todo. En prácticamente todos los medios se habla de precios oficiales, pero esos no son los que en realidad encontramos en las diferentes tiendas y grandes superficies. En muchos establecimientos podremos encontrar packs con juegos por un precio igual o incluso inferior al oficial, unas ofertas suculentas que no sabemos cuánto durarán. Y si a ello le añadimos los famosos días sin IVA, no sé qué hacéis que todavía leyendo esto.
FEEDBACK Y PHIL SPENCER
Si por algo hay que aplaudir a Microsoft en los últimos meses es por su capacidad de saber atender a las necesidades del usuario. El giro de 180º que dieron en sus políticas anti-segundamano después de las protestas masivas de la comunidad de jugadores fue el inicio de una satisfactoria carrear por mantener a la clientela contenta. Xbox One llegó al mercado sin ciertas características esenciales para la mayoría de jugadores. Unas características que se han ido añadiendo rápidamente gracias a las famosas actualizaciones mensuales, que nos han traído desde el indicador de batería del mando hasta la posibilidad de usar un disco duro externo para almacenar nuestro contenido.
Y la cosa no queda ahí, porque desde Microsoft siguen prometiendo muchas más actualizaciones con añadidos como capturas de pantalla.
Este feedback ha sido posible, entre otras cosas, por la llegada a la presidencia de la división de Xbox de Phil Spencer. La ida y venida de altos ejecutivos no suele suponer un cambio demasiado importante de cara al consumidor, pero Phil Spencer es una excepción. Se trata de un jugador tradicional que valora a los usuarios y a los juegos más que a nada. Así, Xbox One ha dejado de ser tanto un sistema multimedia como una consola en toda regla, prueba de ello es la conferencia de este E3 2014, plagada de juegos.
LIBERACIÓN DE POTENCIA
Por último, voy a tocar un tema bastante escabroso, la potencia de Xbox One. Es de sobra sabido que PS4 es algo más potente que la consola de Microsoft, y no lo voy a negar. Sin embargo, recientemente Microsoft decidió dejar en manos de los desarrolladores el 10% de la potencia de la consola destinada a la captura de movimiento con Kinect.
Esta medida, que coincide con la llegada del pack Standalone a las tiendas, no afectará a los comandos de voz y permitirá a los desarrolladores dar un empujoncito en términos gráficos a sus títulos.
Desarrolladoras como Bungie han afirmado que han conseguido llegar a 1080p en Destiny, igual que en Playstation 4. Otros, como Insomniac Games, han decidido utilizar esa porción para incluir más detalles en Sunset City.
¿A qué esperas?
Con lo que te he comentado y lo que habrás leído en nuestra página o en otras, espero que te hayas decidido a comprar esta magnífica consola. Quizás la prensa inicialmente haya hecho mucho daño a la imagen de Xbox One, pero actualmente la consola está remontando a un ritmo espectacular y dentro de unos meses podrá competir mano a mano con la competencia. El futuro pinta cada vez mejor con la llegada de las sagas míticas de la compañía, así como la adaptación de las desarrolladoras a la plataforma.
Y si no te he convencido, no te vayas muy lejos porque Microsoft sigue emperrada en mejorar su producto cada día. Así que quién sabe, ¿quizás con una bajada de precio? O puede que lo que te haga caer sea la rumoreada versión blanca de la consola.
Sea como sea, esperamos verte en Xbox Live pronto.