Forgotten Empires junto a Xbox Game Studios, nos otorgan la oportunidad de disfrutar una vez más de Age of Empires II: The Age of the Kings, una de las entregas más exitosas de la saga de estrategia que llegó nada más y nada menos que hace 20 años ahora de forma exclusiva en HD y resolución 4K. Pero antes de empezar, hay que dejar claro que Age of Empires II: Definitive Edition se trata de una remasterización y no de un remake -por si había lugar para la duda-, en la que los gráficos se han mejorado y a su vez han aprovechado para añadir algunas novedades que vamos a ir comentando. ¿Empezamos?
Si de algo se ha caracterizado siempre la saga Age of Empires ha sido por plasmar de la forma más fiel posible hechos históricos, dándonos una perspectiva más versátil en la que no solo podamos jugar y punto, si no también aprender mientras lo hacemos, algo que a Ensemble Studios, hasta su disolución, se le dió muy bien y que ahora Forgotten Empires sigue aprovechando al máximo, dejando atrás aquello de que todos los juegos de este género se limitan a zurrarse unos a otros sin ningún objetivo más que ganar o sin una historia de gran peso por delante. Age of Empires va mucho más allá de eso.
¿Solo una trama? Eso es para novatos
En esta segunda entrega -que con esta nueva edición que nos llega viene acompañada de todo el contenido adicional incluidas las expansiones The Conquerors, The African Kingdoms y Rise of the Rajas-, nos permite conocer diferentes tramas repartidas por todo el mundo como la del famoso caballero El Cid, Juana de Arco, William Wallace o Barbarroja entre muchos otros. Todas estas -hasta la friolera de 16- con su respectiva introducción que nos permite fácilmente ponernos en situación.
Pese a que en el título original ya podíamos conocer dichas tramas, en esta nueva edición se ha añadido una compaña totalmente nueva: The Last Khans, en la que empuñaremos el arma de Koten Khan, líder de una tribu de cumanos situados en la parte occidental de Europa cuyo único objetivo es sobrevivir a los fieros ataques de los mongoles. Hay que decir que, pese a que sigue el mismo ‘modus operandi’ que las demás tramas, The Last Khans aporta un pequeño soplo de aire fresco al remaster, permitiéndonos conocer a una de las cuatro civilizaciones implantadas y dejando caer una bonita oportunidad de añadir nuevas campañas en un futuro.
Pero esto no se queda aquí, pues además de las campañas principales, contamos también con dos modos alternativos de juego en solitario: Batallas Históricas, donde, como su propio nombre indica, ya no representaremos a un personaje célebre en específico si no a una nación entera reviviendo las guerras más famosas de todos los tiempos desde el año 557 con la batalla de Bujará hasta 1598 con la del Estrecho de Noryang y mucho más. -Personalmente con lo que más he disfrutado debido a su dinamismo en cuanto a historias y escenarios en si, pues no nos permite caer en la monotonía-.
Y el segundo modo: El Arte de la Guerra, o lo que es lo mismo, jugar mediante desafíos a cambio de medallas, para aquellos jugadores avanzados que quieran ir un paso más allá en el juego de estrategia en tiempo real.
El juego cobra vida con su nuevo aspecto
Visualmente -como es lógico- ha mejorado, las animaciones ya no resultan tan ‘bastas’, los escenarios han cobrado vida y el aspecto de bocetos, personajes así como de las edificaciones se notan más pulidas y trabajadas, con un buen juego de colores que otorgan más realismo a la vegetación y las texturas de los objetos, aunque sin esperar un cambio drástico claro está, pues sin rodeos el juego ha mejorado gráficamente de tal forma que en la actualidad no nos duelan los ojos al jugar, manteniendo esa esencia del título de 1999 adaptada a los tiempos de ahora.
En lo jugable, Age of Empires II: Definitive Edition conserva las mismas pautas que su versión original, aunque se han añadido interesantes elementos como el zoom en medio de la partida, algo bastante simple pero que muchas veces se echaba en falta en el primero, el modo espectador de su multijugador y ciertos cambios durante el control de la partida, que nos permiten aprovechar mucho más el tiempo de nuestras tropas y aldeanos.
El sonido: el yin y el yang del título
Por último, su apartado sonoro, que pese a que lo haya dejado para el final, es sin duda uno de los apartados más destacables. Lejos de optar por otras opciones, han logrado un gran trabajo remasterizando la banda sonora al completo de Stephen Rippy, que es sin duda uno de los mejores puntos de este Age of Empires II, ¿el problema? El doblaje de los personajes. Han intentado meter con calzador un español con cierto acento para que sea -supongo- viable tanto para Hispanoamérica como para España -algo que carece de sentido debido a que el propio juego en opciones generales puede cambiarse a español latino también-, teniendo como resultado unas voces un tanto extrañas sobretodo cuando intentan imitar los acentos de las diferentes regiones en las que luchamos.
En definitiva, Age of Empires II: Definitive Edition adapta a los tiempos actuales el mítico juego de los 90 como era previsto, con grandes mejoras gráficas incluyendo resolución 4K, novedades y cambios en lo jugable que beben de los juegos de estrategia actuales y una banda sonora remasterizada con mimo en la que la nostalgia se apodera de nosotros, aunque el doblaje podría mejorarse.
El juego está disponible desde el 14 de noviembre en la Windows Store y, por primera vez, también en Steam por un precio de 19,99€, aunque los usuarios de Xbox Game Pass Ultimate podrán disfrutarlo de forma totalmente gratuita.