Three Fields Entertainment es una empresa creada por los propios fundadores de Criterion Games, que desde su anuncio, nos ha tenido emocionados ante el posible título que iban a mostrarnos, donde ellos mismos citaban a todos los fans de Burnout, juego estrella de la compañía anteriormente mostrada, y Black, uno de los shooters en primera personas más impactantes de hace dos generaciones. Este anuncio no hizo más que generar dudas respecto a qué tipo de juego llegaría en las actuales consolas, muchos de nosotros especulábamos con la posibilidad de que fuese un juego de conducción donde las armas tuviesen un gran protagonismo sin embargo, si profundizamos algo más en lo que nos ofrecían esos dos videojuegos, llegamos a una sola palabra que abarca todo el concepto que nos propone Three Fields Entertainment; destrucción.
La propia destrucción es el elemento principal de Dangerous Golf, un juego que se desmarca del serio estilo de simulación de los demás juegos basados en este deporte, y nos enseña una visión que no pasará desapercibida para muchos usuarios. El objetivo principal de este título no es otro que el de destruir el escenario en los cinco modos principales que tendremos disponibles. El primero de ellos llamado ‘Tour mundial’, será uno de los que más horas le echemos donde tendremos que ir superando los diferentes hoyos repartidos en las distintas y muy variadas localizaciones que simplemente debemos destruir, siendo Francia, Estados Unidos, Inglaterra y Australia los lugares que conformarán este Tour de auténtico caos. El segundo modo lo conforma el propio Tour Mundial pero esta vez con opciones cooperativas donde la diversión está más que asegurada junto a nuestros amigos obligándonos a ponernos de acuerdo para que juntos, cumplamos los diversos objetivos que nos obliga a completar Dangerous Golf, sin embargo no es este el único modo que nos hará disfrutar de esta propuesta acompañados, y es que ‘Party Golf’ nos permite competir en un multijugador local de hasta cuatro jugadores donde las risas están más que aseguradas. Por último y no menos importante, tendremos el modo ‘Casa Club’ el cual nos brindará la opción de jugarlo solos o en línea. El concepto de ‘Casa Club’ es básicamente un modo libre, donde podemos configurar los torneos a nuestro gusto, combinando hoyos con cientos de posibilidades, eso sí, para poder elegirlos, antes debemos desbloquearlos jugando al Tour Mundial que será la parte principal del programa.
Como comentamos, al iniciar una partida debemos completar varias misiones que nos permitirán ganar más puntos, sin embargo el objetivo principal es destruir lo máximo posible dentro de los diversos escenarios que tendremos disponibles, para ello contaremos con la ayuda de pistas que nos resaltarán los objetos que pueden crear más caos, como por ejemplo una lujosa vitrina llena de botellas de champán listos para explotar. Una cocina llena de tartas recién hechas, la mesa puesta con la mejor vajilla de la casa, auténticas pirámides de copas de cristal son algunos ejemplos de los escenarios que con total libertad podremos destrozarlos con l ayuda de nuestra quería pelota de golf. Si en nuestro primer tiro conseguimos un número determinado de puntos, desbloquearemos un poder llamado Smashbreak, que será uno de los poderes disponibles que tendremos y que convertirá nuestra pelota en una peligrosa bola de fuego controlada por nosotros mismos y nos ayudará a aumentar la puntuación aún más para llegar a conseguir una de las tres medallas que necesitaremos para desbloquear un nuevo hoyo. Este no será el único poder que conseguiremos a lo largo de nuestra aventura que como indicamos, no busca en ningún momento la verosimilitud del disparo.
Es de especial mención la gran recreación de los niveles junto con las amplísimas posibilidades de destrucción que nos ofrece, dando así un título que pese a su propuesta simple, goza de un increíble aparatado gráfico que se muestra en todo su esplendor cuando vemos como ha quedado reducido a escombros todo el escenario que tenemos alrededor. Aunque no todo son buenas noticias, y es que la jugabilidad de Dangerous Golf no llega al nivel que se espera de un título de estas características, con unos tiros demasiado automatizados y sin posibilidad de ajustar el tiro tal y como si lo hacemos en otros juegos de corte similar, a esto hay que añadir las desesperantes pantallas de carga que están mucho más presente de lo que quisiéramos algo que lastra y mucho la experiencia. Por otro lado el juego llega con los textos en español aunque esta traducción presenta aislados errores ortográficos e incluso partes de texto directamente sin traducir algo que no entendemos.