Esta generación de consolas que empezamos a finales del 2013 nos ha ido regalando una gran cantidad de buenos juegos, llegando en muchos casos a conseguir auténticos referentes dentro de un género o de una franquicia, juegos que posiblemente marcarán un punto de inflexión y serán recordados por todos nosotros.
Sin embargo, no pillará por sorpresa a nadie el hecho de que hay géneros que están completamente huérfanos y faltos de referentes, entre los que por supuesto encontramos los juegos de terror. El claro ejemplo de esta terrible situación, es que una mera demostración técnica como fue P.T. (aunque era exclusivo de PlayStation 4) es lo más parecido a un referente dentro de esta generación de consolas.
Y aquí es donde nuestros amigos polacos de Bloomer Team han visto una fantástica ocasión de mercado, y han visto la posibilidad de entrar por la puerta grande en un sector terriblemente competitivo. Y sinceramente, he de decir que Layers of Fear, el juego desarrollado por este estudio, ha conseguido trasmitirme unas sensaciones que hacía mucho tiempo que no sentía. Aunque posiblemente haya disfrutado más por la ambientación y lo que se esconde detrás de la historia del juego, que en lo que respecta a la faceta de terror y/o miedo.
Pasando un poco de miedo
Layers of Fear ha sido uno de los juegos que hemos podido disfrutar antes de tiempo a través de Xbox Game Preview, un juego que poco a poco ha ido ganando notoriedad entre los usuarios y ha ido generando mucho más interés a medida que iba avanzando el proyecto de este estudio polaco. Pero, ¿Qué se encontrará la gente que decida darle una oportunidad a Layers of Fear?
En esta tenebrosa aventura nos encontraremos con un protagonista del cual desconoceremos su identidad, y apareceremos en una casa que no pasa por su mejor momento, donde todo lo que nos rodea nos invitará a pensar que algo raro se está cociendo. Un lugar oscuro, árido e incluso cruel y despiadado con nosotros en donde uno de nuestros mejores aliados serán los puntos de luz que nos darán un merecido momento de descanso y relax de toda la tensión, lámparas o velas cualquier pequeña ayuda es bien recibida.
Por desgracia rápidamente nos daremos cuenta del que es el problema o el hándicap más importante de Layers of Fear, al menos bajo mi punto de vista. Este fallo no es otro que la extrema sensación de guía nos ofrece el juego, esa sensación de que únicamente podemos ir por un pequeño pasillo que nos irá llevando de sala en sala. Una forma de funcionar que acaba trasmitiéndonos la sensación de que no hacemos lo que nosotros queremos, si no lo que hacemos lo que quiere el juego.
Todo este polvo solo nos lo sacudiremos de encima en el momento que tengamos que resolver pequeños puzles que nos hagan salir de situaciones peliagudas o surrealistas que viviremos dentro de los muros de la casa. En su inmensa mayoría, estos puzles son muy pero que muy sencillos, y no nos llevará mucho tiempo poder descubrir que tenemos que hacer. Eso sí, estas situaciones nos permitirán disfrutar de algunos de los mejores momentos del juego, con zonas espectaculares.
La historia depende de ti
Pero el gran acierto de Layers of Fear, bajo mi humilde opinión, es la forma que tiene el juego de contarte la historia. O, mejor dicho, la forma en la que el título desarrollado por Bloomer Team no nos cuenta la historia que se esconde detrás de esta fantástica aventura, si no que será el propio jugador quien estando en los mandos elucubre sobre todos los hechos acontecidos dentro de esas oscuras paredes.
¿Cómo podremos ir atando cabos de los sucesos que han estado ocurriendo? Sencillo, nos iremos encontrando a medida que avanzamos, siempre y cuando investiguemos un poco los escenarios), fotos familiares de la familia que reside y/o residía en la casa, así como objetos personales de los distintos miembros del núcleo familiar, y distintas notas escritas. Notas de la mujer, del marido o incluso notas que nos hacen pensar que algo no acababa de ir bien como pueden ser el caso de un médico o de un abogado.
Pero esta particular y fantástica forma de contar la historia principal, choca con ese escaso grado de libertad que nos ofrece el juego, y voy a poner un pequeño ejemplo para ilustrar la situación. En un momento determinado, nos encontraremos en que el juego nos ofrece la posibilidad de abrir una cantidad X de puertas, posiblemente varias de ellas esconden secretos, pero si tenemos la mala fortuna de abrir directamente la principal, la puerta se cerrará a nuestro paso y evitará que podamos retroceder a inspeccionar las salas previas. Lo peor es que desafortunadamente, no tenemos posibilidad real de volver atrás. En otras palabras, el juego únicamente nos deja mirar hacia delante.
Una ambientación de lujo
En lo que respecta a jugabilidad, el juego no tiene ningún tipo de complicación. Con el stick izquierdo caminaremos (no podemos esprintar en ningún momento), con el segundo miraremos la cámara con un pequeño punto que nos servirá para centrar la imagen en pantalla. Mientras que todas las acciones las realizaremos después de pulsar el gatillo derecho, luego deberemos mover el stick para abrir pertas, cajones, etcétera. Como veis una mecánica realmente sencilla, simple y ágil.
En lo que respecta al apartado técnico, Layers of Fear sufre algunos que otros problemillas que no se si llegarán a subsanarse en algún momento. Sobre todo, se nota que el juego tiene un problema de antialiasing aunque ese no es precisamente el problema más molesto, ya que en bastantes situaciones nos encontraremos con caídas puntuales de framerate que nos harán ver la acción a cámara lenta. Además, un problema que me afectó a mí a título personal fue el mareo que me causaba el juego al tener una opción de “movimiento de la cabeza” activada, una vez deshabilitada esta opción no hubo ningún problema.
Sin embargo, otro de los aspectos realmente cuidados es el sonido. Es una auténtica pasada avanzar por la casa y escuchar como silba el viento por las ventas, como cruje el suelo o como se rompe un cristal, un cuadro, etcétera. Es simplemente maravilloso jugarlo con unos buenos cascos, una experiencia totalmente recomendable. Eso sí, las voces están íntegramente en inglés, aunque tendremos subtítulos en castellano.
Conclusiones
En definitiva, Layers of Fear es un interesante videojuego con una ambientación fantástica que nos mantendrá enganchados a la pantalla durante las 4 o 5 horas que dura el juego desarrollado por Bloomer Team. Las posibilidades que ofrece el juego para que cada jugador descubra por sí mismo lo que se esconde detrás de toda esta situación me parece un acierto mayúsculo, y permite que estés mucho más metido y concentrado a la hora de jugar si quieres sacarle el máximo partido.
Sin embargo, en la otra mano tenemos un gran hándicap como es la escasa libertad de acciones que te propone Layers of Fear, una sucesión de acontecimientos que desembocan en la sensación de que es el juego quien elige el destino del jugador no a la inversa. Aun así, yo os invito a que si os gustan este tipo de juego aprovechéis la ocasión y le deis una oportunidad, ya que no hay nada apenas variedad en el mercado a día de hoy.
