En la generación de Xbox 360, un estudio ucraniano llamado 4A Games desarrolló Metro 2033, adaptando a los videojuegos la novela escrita por el autor Dmitry Glukhovsky. El título fue un éxito en todos los sentidos, dejando via libre a una serie de secuelas que culminó en 2019, con Metro Exodus, la última entrega protagonizada por Artyom, la cuál nos llevaba fuera de los oscuros y fríos metros de Moscú, para mostrarnos la Rusia post-apocalíptica en un viaje que sería inolvidable.
Cuando analizamos Metro Exodus en la web, nos pareció un juego excelente, continuista en los aspectos donde debía serlo, y lo suficientemente innovador como para traer nuevas características de peso respecto a las anteriores entregas (por ejemplo, las zonas de mundo libre fueron un cambio enorme, ya que en las dos entregas anteriores la mayoría de la aventura era en el metro de Moscú). Gráficamente, Exodus era un portento, con algún que otro fallo a mejorar. Por eso, 4A Games ha decidido lanzar una actualización gratuita si ya tenías el juego para los usuarios de nueva generación, y de ello hablaremos a continuación. Ahora, relajaos y disfrutad del análisis de Metro Exodus en Xbox Series X.
La aventura de la tripulación de la Aurora en su máximo esplendor
Ya hemos hablado lo suficiente sobre que Metro Exodus es un auténtico portento técnico en todos sus apartados. Cuando se jugaba en Xbox One o, sobre todo, en Xbox One X, parecía que estábamos ante un juego que pertenecía a una generación posterior. 4A Games es un estudio conocido por desarrollar títulos con un apartado gráfico de peso, llevando al límite a las máquinas, como ya pasó en 360. Pero con Exodus se notaba que habían tocado techo, y que habían tenido que renunciar a características (como la iluminación RTX) para que las consolas pudieran moverlo. Por eso, esta edición es la que el estudio tenía en mente, ya que es realmente un juego de nueva generación.
La resolución, como el frame rate, se ven aumentados gracias a la potencia de la nueva generación, pudiendo disfrutar de unos 4K dinámicos a 60 FPS, algo que ayuda a que los tiroteos sean mucho más ágiles y precisos, ya que parece ser que se ha arreglado el input lag que tenía la versión de One.
Una iluminación que te quita la respiración
Pero si hay algo en lo que de verdad destaca esta versión es, sin lugar a dudas, el nuevo sistema de iluminación que se ha implementado. 4A Games ha rehecho la iluminación que ya tenía la versión original, y basándola en el RTX. Todos los objetos que iluminan, emiten rayos que van rebotando con cada superficie que se encuentran, haciendo que cada escena sea mucho más realista, con unas sombras mucho mejor definidas. Esto, sumado a la posibilidad de tener HDR activado, hace que las escenas se vean más vivas.
Los que salen realmente beneficiados de esta nueva iluminación son los escenarios, y gracias a ello, el usuario se siente mucho más inmerso en el universo. En este apartado es donde de verdad se nota la mejora gráfica respecto a la versión de One. Incluso la nueva iluminación hace mucho más inmersivo el gameplay, haciendo que las fuentes de luz como la linterna o el mechero sean mucho más vitales en las zonas más oscuras de la aventura.
La edición definitiva de Metro Exodus
4A Games no solo se ha dedicado a mejorar y depurar la aventura protagonizada por Artyom y los tripulantes de la Aurora, si no que también han sido mejorados las dos historias de los DLCs, algo que hace el pack completo de Metro Exodus mucho más atractivo para hacerse con él. Los que no hayan querido (o podido) hacerse con él durante la generación de One, y quiera experimentarlo, esta es la ocasión perfecta.
Metro Exodus y sus DLCs consiguen ampliar el universo creado en los libros y videojuegos anteriores, mientras el estudio ucraniano junto al autor de los libros nos cuenta una historia fuera del Metro, fuera de la zona de comfort tanto de los personajes como de los usuarios, obligándonos a vagabundear por una Rusia post-apocalíptica con unos entornos variados, separados por las estaciones del año. Un plantel de personajes carismáticos y que, al final, les coges mucho cariño, junto a un gameplay muy cuidado y una historia dramática a la par que interesante conforman uno de los títulos más redondos que hay ahora mismo, y un digno sucesor de Metro 2033 y Metro Last Light.