Te contamos lo que nos ha parecido la nueva entrega de la saga de hockey sobre hielo con nuestro análisis de NHL 18 en Xbox One. Pero antes tengo que mencionar que no soy un aficionado a este deporte, aunque tras habernos llegado a la redacción una copia del juego para analizar, nos ha parecido interesante ofreceros nuestra opinión sobre el título de Electronic Arts, ya que al igual que nosotros, es posible que algunos de vosotros hayáis probado alguna edición anterior gracias al servicio EA Access y su The Vault, y os hayan parecido juegos bastante divertidos una vez que nos hacemos a las reglas básicas del juego y el deporte.
Nuevo sobre el hielo
Como lo más probable es que estéis más o menos en la misma situación que yo, os explicaré cómo ha sido mi acercamiento a este NHL 18, y cuáles me han parecido sus mejores virtudes -o fallos-, desde el punto de vista de un novato en el deporte. Hay que mencionar que de cara al jugador novato, NHL 18 se muestra bastante receptivo, con controles adecuados y sencillos; y con tutoriales que, lejos de resultar tediosos o complejos, son bastante sencillos e intuitivos.
Así que en un ratito podemos estar disputando partidos sabiendo, en realidad, de hockey sobre hielo, poco más que se trata de un deporte en el que debemos meter goles introduciendo el puck en la portería rival. Lo demás poco a poco se va aprendiendo más o menos fácil, y quizás las reglas más complejas como las del fuera de juego, puedan darnos algo más de trabajo, pero nada muy preocupante, puesto que nos percatamos fácilmente de cuestiones como el campo atrás.
Lo bueno de NHL frente a la saga Madden NFL es precisamente esto, la sencillez con la que podemos introducirnos en un deporte que resulta mucho más intuitivo a nuestros ojos que el fútbol americano. Claro que algo también tiene que ver el hecho de que controlar a nuestro equipo sobre el hielo resulta mucho más fácil. No cuesta nada empezar a pasar el, robar el puck a los rivales, o incluso atreverse con alguna que otra filigrana (que se llevan a cabo con el stick derecho). No me he atrevido todavía con los controles más exigentes, pero con los recomendados por el propio juego, el manejo se hace bastante arcade y divertido, a la vez que se ofrecen suficientes posibilidades para que en poco tiempo comencemos a trazar jugadas diferentes durante el partido, y empecemos a dar un poco de rienda suelta a nuestra imaginación.
Pero además del control al conducir el puck, también pasar o disparar resultan acciones bastante gratificantes, ya que no llegan a ser del todo automáticas, aunque podamos contar con ayudas, por lo que se exige por nuestra parte cierto aprendizaje y precisión. A eso ayuda también los movimientos del disco, que se comporta de forma muy natural en cada acción o rebote. También la dificultad de la IA se encuentra muy bien equilibrada de cara a que el jugador novato pueda ir aprendiendo el deporte y mejorando a su propio ritmo sin que aquello parezca el clásico paseo de la dificultad Principiante del FIFA, que se le pone a los críos que están comenzando a jugar para que goleen al rival.
Otra cosa que viene muy bien para este proceso de aprendizaje son las puntuaciones que el propio juego nos va marcando en cada partido. Cuando pausamos o se corta el juego podremos ver una calificación de cómo lo estamos haciendo de bien en diferentes facetas, como el juego en equipo o el ataque.
Jugando como sabemos
Tras los primeros partidos, cuando se va pillando el gustillo a esto del hockey sobre hielo, pasamos a interesarnos por los modos de juego que ofrece NHL 18, y que vienen a ser similares a los que hay en los demás títulos deportivos de Electronic Arts. Es decir, tenemos un modo en el que ponernos a cargo de una franquicia e intentar llevarla a lo más alto, un modo Ultimate Team (HUT) en el que ir creando nuestro propio equipo de una forma muy similar a la que lo hacemos en FIFA, o un modo en el que controlar a un único jugador. También los habituales modos de práctica, exhibición o torneos oficiales. Todo ello acompañado de unas licencias que pueden no resultar tan trascendentes para los inexpertos en el deporte, pero que son un aliciente para aprender un poco más sobre su cultura.
Los modos de juego son clásicos, pero interesantes para introducirnos todavía mejor dentro de lo que es el hockey sobre hielo. Mientras que en el modo manager, aunque es el más complejo, iremos comprendiendo los entresijos de las competiciones y cómo funcionan los clubs, en el modo HUT (Hockey Ultimate Team), aprenderemos sobre las estadísticas de los jugadores, los que son mejores, lo más populares, etc. Y a través del modo carrera contaremos con la opción de comprender mejor el funcionamiento del deporte a nivel individual. O el modo de 3 contra 3, ideal para practicar jugadas individuales o contraataques. Todo un conjunto de modos que son perfectos para introducirnos -y también por supuesto si ya conocéis el deporte- al hockey sobre hielo y quedarnos con una pizca de la pasión que desata en otros lugares como Norteamérica. Y tomando perspectiva, estupendos para cualquier juego deportivo, EA tiene la fórmula y sabe usarla muy bien.
En cuestión de sonido y ambientación, la recreación es muy buena. Una pena, eso sí, que el juego llegue en completo inglés; cosa lógica dado el poco interés en nuestras fronteras en el hockey. Es en el apartado gráfico donde parece que flojea un poco más, y no se nota ese salto que sí ha logrado dar por ejemplo FIFA en los últimos años. Aun así todo funciona bien y se logra transmistir las sensaciones de cada competición. No sé, la verdad, si de forma totalmente fiel, pero desde luego sí muy creíble.
Conclusión
Si os gustan los juegos deportivos y tenéis curiosidad por probar con algo diferente a los habituales títulos de fútbol o baloncesto, NHL 18 es un juego tan accesible como divertido. Quizás no resulta en otros aspecto tan completo como sus hermanos, FIFA 18 o Madden NFL 18, pero cuenta con opciones más que suficientes para atraparos en cualquiera de sus modos de juego. Y la verdad es que no solo es gratificante aprender a jugarlo más a fondo, sino también aprender sobre la propia cultura del hockey sobre hielo, que al igual que en el resto de títulos deportivos de Electronic Arts, está estupendamente representada, con licencias, ambientación, comentaristas o banda sonora.