En un medio saturado de títulos de acción, disparos y mundos abiertos, el panorama independiente debe abrirse hueco con propuestas alternativas, distintas a todo lo que los grandes estudios ofrecen año sí, año también. Eso es precisamente lo que ha hecho la compañía galesa Wales Interactive a lo largo de la última década. Y es que este pequeño estudio afincado en Pencoed se ha especializado en el género FMV (full motion video o vídeo de movimiento completo), también conocido como película interactiva. En sus obras nos presentan historias expuestas en acción real, interpretadas por actores y en las que el jugador debe tomar decisiones concretas para llegar a uno u otro final.
Night Book, el videojuego que hoy nos ocupa, vuelve a adoptar esta técnica que el estudio ya ha explotado en The Bunker, Late Shift, The Complex, Five Dates o Gamer Girl y ahora regresa a la carga con su obra más modesta, adaptándose a los tiempos de la pandemia y grabando toda la acción en un interior. Acompáñanos en las próximas líneas para descubrir qué nos ha parecido en nuestro análisis de Night Book para Xbox One, si bien hemos podido jugarlo en una Xbox Series X.
La casa de los espíritus
Lo nuevo de Wales Interactive nos presenta una historia simple, pero no por ello menos efectiva. Loralyn trabaja desde su casa como intérprete online de francés e inglés, pero la situación no es sencilla para ella: su pareja está trabajando en el extranjero, su padre padece una enfermedad mental y ella está embarazada. Todos estos condicionantes confluyen cuando en una de sus llamadas de trabajo se topa con un libro antiguo escrito en una lengua que pocas personas conocen, la propia Loralyn entre ellas. Sin embargo, ese libro también parece tener la capacidad de despertar a fuerzas malignas.
Bajo esta premisa, Night Book se aleja de anteriores trabajos del estudio galés (que había explorado sobre todo el thriller) y nos sumerge en una historia de terror. La música, los efectos sonoros, las interpretaciones… todo está pensado para generar miedo en el usuario. Desgraciadamente no podemos decir que ese haya sido nuestro caso, pero de cualquier forma la experiencia que ofrece es divertida y corta, lo que dota al videojuego de un componente de rejugabilidad muy, pero que muy importante. Cada partida dura alrededor de cuarentaicinco minutos, por lo que disfrutar de esta película interactiva con amigos en algún rato muerto puede ser una muy buena opción.
El efecto mariposa
No entraremos en más detalles argumentales para no destripar el devenir de la historia, pero sí conviene realizar un par de apuntes para que sepas qué te encontrarás si te decides a experimentar esta nueva propuesta FMV. Night Book nos permite tomar alrededor de cuarenta decisiones por partida, lo que marcará no solo la forma de avanzar de la historia, sino el destino de los personajes en ella implicados. Sin embargo, solo hay una decisión que afecte de manera drástica a lo que nos encontraremos durante nuestra partida. Se produce en un momento en el que deberemos elegir cuál de los dos trabajos que nos ofrecen queremos aceptar.
Aunque el fin acabará siendo el mismo, la forma de llegar a él será muy distinta. De hecho, escoger una de las opciones nos ofrecerá la oportunidad de conocer a unos personajes y nos privará de conocer a otros, y viceversa. Este es el principal punto de rejugabilidad de Night Book, pues el resto de decisiones afectan a aspectos concretos y puntuales que pueden derivar en la supervivencia o la muerte de un personaje, pero sin alterar en consideración lo que veamos ante nosotros.
Más allá de esta puntualización, los rejugados del título de Wales Interactive nos invitan a explorar los hasta quince finales distintos que componen la obra, a descubrir los cinco documentos con los que puede interactuar Loralyn y a ver qué ocurre en nuestra partida dependiendo de cómo se encuentren nuestras relaciones con los personajes (en el menú de pausa contamos con un medidor que expone si nos llevamos bien o mal con ellos en relación a las decisiones que hayamos tomado y cómo nos hayamos expresado cuando nos hemos dirigido a ellos).
Actividad paranormal
Hemos hablado sobre la historia de Night Book y sobre sus opciones de rejugabilidad, pero el grueso de la valoración que merece este juego recae en sus valores de producción, así como en sus interpretaciones y en su puesta en escena. Todo lo que hace Wales Interactive en esta nueva película interactiva recuerda a películas como Paranormal Activity o la reciente Host, en las que las cámaras de seguridad o la interfaz de un ordenador gozan de un enorme protagonismo. Sin embargo, personalmente me gustaría destacar la actuación de la actriz principal, Julie Dray, que sostiene la historia al completo. Te guste más o menos la historia del juego, Dray es sin duda quien la sostiene y gracias a la cual jugarla tiene sentido.
El resto del reparto cumple el expediente y ayuda a generar una atmósfera que, no obstante, se queda lejos del nivel de terror que seguramente Wales Interactive pretendía generar.
Conclusión
Si eres aficionado a las películas interactivas o a los videojuegos narrativos, Night Book es una opción muy interesante teniendo en cuenta su modesto precio. No es la historia más terrorífica del mercado, pero sí es lo suficientemente atrayente para entretenernos durante los cuarentaicinco minutos que dura. Incluso consigue que nos pique la curiosidad y exploremos algunos más de los finales que contiene.