No son muchos los juegos arcade que intentan recrear batallas aéreas de la historia. No obstante, hay gratos recuerdos de muchos juegos, con diferentes estilos, que han abarcado los combates aéreos desde una perspectiva de acción directa. Nos encontramos con un juego realmente interesante que aprovecha el momento y ofrece una acción sencilla y directa. Descubre en este análisis de Red Wings: Aces of the Sky qué se siente cuando se emula al mismísimo Barón Rojo.
Desde clásicos como 1943, surcar los cielos con un avión de combate y hacer frente a oleadas de enemigos ha sido una manera de abordar la acción arcade. Otros títulos, como Afterburner, optaron por algo más moderno. En estos últimos años, el mejor ejemplo lo tenemos con War Thunder, aunque con una perspectiva algo distinta. Red Wings: Aces of the Sky intenta rememorar la historia, más concretamente, la Primera Guerra Mundial, con figuras míticas como el Baron Rojo, Manfred von Richthofen.
Un diseño de cómic, muy colorido y atractivo
Para ello, se ofrece una propuesta muy colorida, con un estilo más cercano a las novelas gráficas. Con este estilo tan peculiar, la acción que recrea no será espectacular, pero si es tan efectiva como una ráfaga de proyectiles sobre estos clásicos aviones de combate. Hay un buen elenco de modelos reales, que se pueden personalizar. Aunque su diseño, caricaturizado, pueda parecer muy simple, no les faltan detalles. Lo mismo podemos decir de los escenarios, que se adecuan a este estilo vintage basado en el diseño de las novelas gráficas. Muy acorde a cómo gestiona la narrativa en determinadas secuencias cinematográficas.
Con una perspectiva fijada en una cámara de persecución, nos adentraremos en extensas áreas de combate repletas de enemigos. Una ambientación curiosa, pero hay que reconocerle que es efectiva, porque el rendimiento es fluido. Dado esta decisión, se podía esperar que se aprovechase mejor el escenario para abarcar combates más multitudinarios. En cuanto a la banda sonora, tiene una ambientación correcta y resulta contundente. A esto, se añaden buenos efectos de sonido, aunque tanto una cosa como la otra resultan algo limitadas en diversidad. Con una traducción al castellano que permite seguir las escuetas explicaciones necesarias, así como seguir el hilo de unas historias basadas en situaciones reales en el campo de batalla, se tiene todo lo que se necesita.
Estilo de novela gráfica para diseños, texturas y narrar la historia de la campaña
La jugabilidad resulta accesible, y esto hace que Red Wings: Aces of the Sky sea un juego que a los amantes de los combates aéreos les gustará. Porque apenas hay que preocuparse de la velocidad y la temperatura de las armas, el resto es atacar y defenderse. Cierto es que hay que vigilar el daño que recibimos y el combustible del avión, que son aspectos que recargamos en puntos concretos repartidos por el mapa. A partir de ahí, los combates se desenvuelven grácilmente y de forma muy directa. Sin complicaciones, y sin contemplaciones.
En torno a los modos de juego nos encontramos cosas curiosas. La primera es que tenemos un modo historia dividida en dos bandos y 25 capítulos convertidas en misiones. Y en este aspecto resulta llamativo que además de combates aéreos, hay otras pruebas que exigirán cierta habilidad para pasar puntos de control, o bombardear algunas zonas esquivando el fuego de antiaéreos. Con una narrativa que nos lleva al bando del eje o al de los aliados, superar cada misión con tres estrellas será un auténtico desafío.
Cumplir los desafíos otorga medallas para desbloquear habilidades
A lo largo de las misiones se puede observar que irán apareciendo enemigos más duros, más capaces o más letales. Poco a poco la complejidad de cada escenario requerirá más de nosotros como pilotos y combatientes. Desde cazas, a fortalezas volantes, las fases se desarrollan con una acción comedida que se disfruta más si no hay que pensar en un tiempo límite para completarlas. Este aspecto, de primeras, puede resultar algo frustrante, pero casi es mejor dejarlo para una segunda vuelta y disfrutar del juego mientras se gana experiencia.
Y es que se ha gestionado de este modo la obtención de puntos para emplear en el árbol de habilidades del piloto. Podremos mejorar cada una de las cuatro habilidades activas y las diversas ramas de las habilidades pasivas. De este modo, aunque de primeras no se consiga el objetivo de las tres estrellas, en una segunda vuelta puede resultar más sencillo, que en absoluto quiere decir fácil. Entre los elementos desbloqueables, también hay algunos objetos estéticos para el elenco de 10 aviones. Para obtenerlos, hay que superar ciertos registros en ciertas misiones. Si al final, el desafío está en superar ciertas marcas y seguir divirtiéndose con la acción de este juego.
Se ofrece algo de variedad con otros modos alternativos, como el de bombardear
Y no solo es para jugar en solitario, también se puede jugar en multijugador. Pero de forma bastante sorprendente, nos encontramos limitados a un modo multijugador local. Dos mandos, dos jugadores y tanto la campaña como los otros modos disponibles, solo pueden jugarse en la misma consola. Abordando estos dos modos adicionales, tenemos un clásico modo supervivencia basado en puntuación y marcador, al puro estilo de recreativa. Y un modo de confrontación que irá más allá de los codazos en el sofá.
Entre las principales carencias que vemos, está la de los contenidos. Y es algo que puede cuestionarse en cierto modo, porque siendo un juego que atrapa por horas, la diversidad podría ser mayor. Y sobre todo cuando hablamos de esos modos de juego adicionales. Completarlo al 100% será una tarea complicada, pero no deja de faltar esa complejidad de las misiones más avanzadas en un modo de acceso rápido. Es lo que es, y que se advierta esto es que en su conjunto, está bien planteado.
Un juego directo, divertido y adictivo para los apasionados de los combates aéreos.
Red Wings: Aces of the Sky es una propuesta sencilla para los amantes de los combates aéreos. Una propuesta desafiante, sobre todo porque gran parte de las cosas se consiguen superando los desafíos y obteniendo las tres estrellas. Buenas dosis de acción que en sendas campañas dará unas cuantas horas. Se podría requerir de más, porque el juego resulta atractivo y los modos de juego adicionales ayudan, pero no sacian. Se podía haber planteado un multijugador más convencional, tirando de online, con batallas con más jugadores. Pero hasta aquí llegó Red Wings: Aces of the Sky, como un producto que rellena bien esos tiempos muertos con acción de la vieja escuela.