Bandai Namco está acostumbrada a ofrecernos productos basados en la estética anime, especialmente los relacionados con franquicias oficiales como Dragon Ball, Naruto o One Piece; pero también es capaz de ofrecer propuestas propias que son capaces de atraer el interés del jugador, como por ejemplo ocurrió con Code Vein y su diferente punto de vista de los vampiros.
Normalmente, la compañía ha puesto en nuestras manos proyectos que no parecían tratar de ofrecer más que un mero entretenimiento, lo que finalmente pasaba factura a algunas de sus obras. No obstante, Scarlet Nexus ha llegado para “revolucionar” este aspecto, siendo uno de los proyectos más ambiciosos hasta le fecha de la editorial, con una apuesta de gran calibre no solo es su apartado visual o jugable, sino también con una historia que se sale de las vías convencionales. Sin embargo, ¿Será suficiente para ofrecer un producto redondo? Os lo contamos a continuación en nuestro análisis de Scarlet Nexus.
Los Hilos Rojos
Scarlet Nexus se ambienta en un futuro lejano, donde la mayoría de la población terrestre ha sido bendecida con una serie de poderes cerebrales tales como la telequinesis, piroquinesis o incluso la posibilidad de moverse a velocidades inapreciables al ojo humano. Los usuarios de estos poderes son conocidos como psiónicos, los cuales componen más del 95% de la población, lo que ha provocado un cambio importante en la forma de vivir, haciendo uso de una tecnología que solamente es capaz de ser percibida por este tipo de personas, marginando a aquellos que no cuentan con estas habilidades al ostracismo.
Ante este “idílico” futuro, la humanidad deberá hacer frente a un enemigo que tratará por todos los medios acabar con nuestra existencia: los Alter, unas criaturas provenientes del espacio que se alimenta de los cerebros humanos y que ha obligado a la humanidad a crear un cuerpo especial para hacerles frente, conocido como las FSA.
Este cuerpo especial está formado por dos tipos de integrantes diferentes: por un lado, por los pisónicos más excepcionales, que son reclutados de manera forzosa para poner a disposición sus poderes en beneficio de la seguridad de la población; y por otro, los voluntarios, aquellas personas que quieren tratar de formar parte de las FSA para entregarse a la causa de proteger a la humanidad.
Es en este contexto donde nos encontraremos con nuestros protagonistas: Yuito y Kasane. El primero de ellos formará parte de las FSA tras haber superado el adiestramiento para los voluntarios, mientras que la segunda cuenta con un poder psiónico por encima de la media, lo que le aseguró un puesto en el cuerpo desde hace mucho tiempo.
Como jugadores, contaremos con la posibilidad de elegir a uno de los dos personajes, lo que supondrá un doble camino diferenciado para conocer la historia que nos propone Bandai Namco, y que puede quedar a nuestra elección por la forma de jugar que deseemos. Yuito contará con una propuesta basada en el cuerpo a cuerpo mediante el uso de su katana, mientras que Kasane contará con unas cuchillas arrojadizas que le permitirá hacer frente a sus enemigos con cierta distancia.
No vamos a entrar en detalles sobre la trama para evitar cualquier spoiler, pero sí nos parece importante destacar que el guion de Scarlet Nexus es posiblemente uno de los mejores que el estudio ha realizado hasta la fecha, con unos giros constantes y con un planteamiento que bebe de varias obras modernas como NieR Autómata en algunos aspectos, dejando esa sensación constante de ganas de más cada vez que avanzamos en su historia. Sin embargo, no todo es perfecto, tal y como comentaremos más adelante.
Siendo consciente de la cierta complejidad de su trama, Bandai Namco ha optado por ofrecer una propuesta alejada de las cinemáticas características de este tipo de juegos, optando por un estilo más similar al de las novelas visuales con un uso de viñetas fantástico, ofreciendo la posibilidad a los jugadores de asimilar todo con un mayor sosiego, y entender así todo lo que tiene que contarnos Scarlet Nexus.
El Poder del SAS
Entrando en el terreno jugable, Scarlet Nexus nos ofrece una propuesta ARPG, siguiendo una vez más su semejanza con el trabajo de Platinum Games y Yoko Taro, siendo capaz de proponer un sistema jugable que enganchará a los enamorados de la acción, y que a su vez permitirá cubrir los deseos de los amantes del rol.
Bandai Namco ha hecho un trabajo fantástico en lo que respecta a su sistema de combate, con una propuesta más similar a lo visto en los Hack & Slash que propiamente al género de rol, ofreciendo un combate que no solo es completo gracias a la amplia variedad de opciones que nos plante, sino también haciéndolo increíblemente divertido a los mandos.
El combate se compone en el uso de golpes rápidos y pesados, los cuales podrán ser combinados con el uso de nuestros poderes, lo que permitirá encadenar combos de lo más espectaculares. Al contrario que en otros juegos del género, aquí no contaremos con la posibilidad de hacer parry a nuestros enemigos, pero sí que tendremos a nuestra disposición un sistema de evasión que, si ejecutamos a la perfección, nos permitirá ejecutar un golpe de gran calibre.
Como todo juego del género, conforme vayamos avanzando en la historia y subiendo de nivel contaremos con la posibilidad de mejorar nuestras habilidades gracias al uso del mapa cerebral, mediante el cual podremos no solo mejorar nuestras capacidades de combate, sino también nuestras estadísticas e incluso potenciar los estados de “despertar” como el Devil Trigger de Devil May Cry, aunque con su propio toque personal.
No obstante, no es aquí donde acaba la propuesta jugable de Scarlet Nexus. Gracias al uso del SAS (Sistema Armamentístico Siánptico), una tecnología desarrollada por las FSA capaz de conectarnos permanentemente con nuestro pelotón, contaremos con la posibilidad de hacer uso de los poderes psiónicos de nuestros compañeros de equipo, lo que aumenta sobremanera la variedad de nuestros golpes, permitiendo encadenar combos absolutamente espectaculares.
Además, el uso de dichos poderes no solo tiene importancia a la hora de encadenar el máximo número de golpes posibles, ya que, dependiendo del tipo de enemigo que nos encontremos (el cual se hace algo repetitivo pasado unas horas) será necesario recurrir a uno u otro para poder acabar con ellos, convirtiendo la propuesta no solo en algo divertido, sino también añadiendo un cierto sentido estratégico a sus batallas.
Por si fuera poco, también contaremos con el apoyo de dos personajes, los cuales podremos elegir desde el menú de nuestro pelotón, contando incluso con la opción de cambiar su estilo de combate, permitiendo que hagan de personajes de apoyo o completamente ofensivos, dependiendo de lo que decidamos en un momento determinado, o bien optando por un modo equilibrado que les hará comportarse con absoluta libertad.
Finalmente, y tras haber explicado las opciones del sistema de combate, también es importante destacar que no está exento de alguna que otra deficiencia. Si bien es cierto que el combate en sí es fantástico, hay momentos en los que se ve un poco empañado por el uso de su cámara. Son varias las ocasiones en las que hemos comenzado a encadenar golpes que, debido a la cámara, han acabado en una cadena de tajos al aire, sin impactar con nuestros enemigos, incluso con el sistema de fijado activado, el cual se reputa imprescindible para disfrutar al máximo de Scarlet Nexus.
Los lazos que creamos
El uso del SAS con nuestros compañeros de pelotón no será solo algo que afectará a la parte jugable de Scarlet Nexus. En los momentos de descanso entre capítulo y capítulo, el juego nos ofrecerá la posibilidad de vivir lo que se conoce como “misiones de vínculo”, lo que nos permitirá ahondar en el desarrollo de los personajes de nuestro escuadrón y en las metas que tienen cada uno de ellos; así como la posibilidad de chatear con ellos, desvelando pensamientos de los mismos.
No obstante, y a pesar de que existen momentos interesantes, es aquí donde florecen los problemas narrativos que comentábamos en las líneas que dedicábamos al modo historia. Aunque por lo general están bien conectados, son varias las ocasiones en las que tras un suceso traumático para nuestro protagonista vivimos una misión de vínculo que hace saltar por los aires la coherencia narrativa de los sucesos, hablando de vivir la vida o comida en situaciones y con personajes que no tienen sentido alguno.
Pero estas misiones no solo profundizarán en la relación que tenemos con nuestros compañeros, sino que también servirá como una forma de desbloquear nuevas habilidades relacionadas con sus poderes, aumentando el espectro de opciones que tendremos a la hora de combatir, añadiendo así otro toque rolero a la aventura.
El Brain Punk
Scarlet Nexus se ambienta en un universo que bebe del Cyberpunk, pero que la propia Bandai Namco calificó como Brain Punk, debido al uso de los poderes mentales que caracteriza a la aventura. En este sentido, el título cuenta con un apartado artístico fantástico, con un diseño visual de escenarios capaces de clavarse en las retinas de los jugadores.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Aunque el apartado artístico del juego en este sentido es fantástico, no ocurre lo mismo con el diseño propiamente dicho de alguno de sus niveles. A pesar de la sensación de amplitud que podríamos sentir en un primer momento, lo cierto es que muchos de ellos son más pequeños de lo que deberían.
Además, aunque es cierto que hay niveles que cuentan con un diseño más trabajado, la sensación global es algo agridulce en sentido general, pues sentimos que el fantástico mundo que se ha creado alrededor de Scarlet Nexus no se explota los suficientemente bien con sus niveles, algo a lo que tampoco ayuda la repetitividad con la que acudimos a varios de ellos a lo largo de la aventura.
Algo similar ocurre con los enemigos. A pesar de contar con diseños ingeniosos, llegado cierto punto, echamos en falta algo más de variedad entre unos y otros, así como la necesidad de contar con una cantidad de jefes finales más diferenciados, lo que habría redondeado sin lugar a dudas el trabajo artístico del estudio.
En términos de rendimiento el juego ha funcionado a las mil maravillas en Xbox Series X con una resolución 4K y 60 fps estables en la mayoría de ocasiones, contando de manera muy puntual con algún bajón casi imperceptible. No obstante, si que es cierto que acusamos un popping excesivo a la hora de recorrer los niveles, algo que empaña un poco el resultado visual, pero que ni mucho menos lo hace algo que afecte al disfrute de la experiencia.
Por último, es importante destacar que el juego cuenta con diálogos en japonés e inglés, pero con textos completamente traducidos al castellano, aunque eso sí, contando con algunos errores de traducción en los mensajes que anteriormente citábamos con nuestros compañeros o en algún momento de las misiones de vínculo.
Conclusiones
Scarlet Nexus es un juego magnífico, no solo por contar con un apartado jugable divertido y profundo, sino también por lo bien construida que está su historia y el deseo constante que nos transmite de querer saber todo lo que envuelve a su mundo capítulo tras capítulo.
Su sistema de combate es capaz de ofrecer una experiencia muy satisfactoria, gracias a la constante sensación de evolución de nuestro personaje, ya sea por sus propias habilidades como por la de los poderes de sus compañeros. Aunque eso sí, no ausente de ciertos problemas como el presente con su cámara, que levantará ampollas en determinados momentos.
Finalmente, su increíble apartado artístico solo se ve empañado por la repetitividad de localizaciones y enemigos, que, de haber sido más variada, habría convertido a Scarlet Nexus en un título prácticamente sobresaliente en todos sus apartados.