Comienza una nueva temporada del campeonato de rally más famoso del mundo con nuestro análisis de WRC 8 en el que descubriremos si la octava entrega firmada por la desarrolladora KT Racing (conocida principalmente por su trabajo en WRC o el reciente V-RALLY) vuelve a cumplir con el estándar de calidad de la saga o esta vez intenta ir más allá con un título que plante cara a su directo competidor.
Tanto si deseamos una experiencia lo más realista posible como si simplemente queremos disfrutar de la adrenalina que nos proporciona el Rally, WRC 8 tiene una dificultad adaptada a nosotros que podremos comprobar en cuanto comencemos, ya que este nos propone completar una etapa del campeonato para determinar el nivel de habilidad y configuración que debemos usar.
Variedad de elección
El campeonato se divide en tres categorías claramente diferenciadas: En WRC Junior, todos los pilotos compiten con el mismo coche y no hay que hacer pruebas de acceso al campeonato, siendo esta la opción recomendada para los jugadores inexpertos que quieran iniciarse. Como opción intermedia tendremos la categoría WRC 2 donde esta vez sí podremos elegir vehículo, con el límite de que debe ser de tracción delantera, y tendremos que causar buena impresión a los reclutadores. No podría faltar la categoría superior del campeonato, WRC será la categoría más recomendada para aquellos jugadores veteranos que quieran disfrutar de una campaña sin límites donde la gestión de equipo cobrará vital importancia para salir victoriosos con nuestro equipo en las etapas que conforman la competición estrella de Rally. Por si esto no fuera poco, KT Racing nos ofrece una categoría de bonificación donde podremos conducir coches legendarios de la WRC aunque conviene aclarar que sin el contenido descargable de pago, esta categoría se antoja anecdótica ya que solo contiene cuatro vehículos en los que se encuentra el mítico Lancia Stratos.
Sin duda alguna, la gran baza principal de WRC 8 es el completo modo carrera en el que participaremos en el campeonato del mundo de Rally y gestionaremos nuestro equipo para llevarlo a la victoria. Para hacerlo posible, empezaremos planteando nuestro calendario y nos prepararemos para la etapa con entrenamientos de lo más variados donde, por ejemplo, nos enfrentaremos a condiciones extremas con lluvia, grava, coche dañado o cualquier otro condicionante que nos pondrá a prueba y lo que es más importante, nos preparará para lo que nos espera, y es que alzarnos con el primer puesto en el campeonato no será tarea fácil.
Chapa y pintura
La victoria no solo se decide en la pista y para ello el juego apuesta por un modelo estratégico en el que debemos gestionar el equipo con una vista cenital de nuestro centro de operaciones. En él tendremos un total de diez zonas diferenciadas en las que administraremos completamente nuestro equipo de competición. La primera de ellas y más importante es el taller, donde configuraremos las preferencias de nuestro vehículo en base a las características y meteorología de la etapa o prueba que vayamos a realizar. La sala del calendario servirá para marcarnos los eventos que vamos a realizar a lo largo de la semana pudiendo elegir entre una gran variedad de entrenamientos de cara al campeonato.
Una vez vayamos completando eventos, subiremos de nivel y esto nos servirá para mejorar nuestro equipo con la sala de I+D donde tendremos a nuestra disposición un gran árbol de habilidades dividido en cuatro zonas (Fiabilidad, equipo, rendimiento y personal) que nos permitirán realizar nuevas acciones, mejorar nuestro vehículo y contratar nuevo personal en la sala de ‘gestión de equipo’. La reputación con el constructor será clave para mantener el contrato y para ello debemos completar los objetivos y requisitos que nos pide en la sala de objetivos, mejorando así nuestra reputación. Siempre podremos ir controlando nuestras estadísticas y clasificación en sus respectivas salas y por supuesto estar atento al correo por las posibles ofertas que podemos llegar a recibir. Todo ello junto con la zona de pruebas y los eventos, dan lugar un modo carrera de lo más completo que se coloca como el apartado más sólido de todo el juego.
Circuitos para todos
Si hay algo de lo que WRC 8 puede estar orgulloso es de ofrecer una cantidad de contenido más que aceptable en su vertiente para un jugador, y es que a parte del profundo modo carrera que nos dará decenas de horas, no faltarán la llamada ‘Zona de pruebas’, donde conduciremos libremente en los 100 circuitos que componen WRC 8 para sacar el máximo provecho a cada trazado, el ‘Modo Temporada’ que es una variación de la carrera con la diferencia de que aquí nos pondremos en la piel únicamente del piloto y no gestionaremos el equipo, ‘Entrenamientos’ se centrará en la práctica de todas habilidades necesarias para afrontar las difíciles etapas debiendo cumplir una serie de objetivos concretos en circuitos cerrados, y por último la recurrente ‘Partida rápida’ donde jugaremos con nuestras propias reglas la etapa que elijamos del campeonato WRC 2019.
No faltarán a la cita los clásicos modos de competición para varios jugadores con la gran novedad de los Esports, que esperamos ver pronto en movimiento con campeonatos en los que cualquier jugador puede clasificarse y luchar por la victoria. Respecto al multijugador clásico, destacamos la pantalla partida y los desafíos semanales que nos irán proponiendo. Dichos desafíos estarán basados en marcas realizadas por los pilotos reales del campeonato oficial de 2019 y nos llevarán a superarlas para alzarnos con el primer puesto en el marcador online. La parte negativa del multijugador de WRC 8 es la imposibilidad a la hora del hacer el análisis de encontrar una partida pública, por lo que si quieres jugar online te verás obligado a crear una partida privada con tus amigos, algo que resta un gran valor a este apartado.
Técnicamente
Respecto a la jugabilidad, WRC 8 cumple, ofreciéndonos una experiencia satisfactoria y muy exigente que aún así no llega a alcanzar el objetivo de transmitirnos una sensación cercana al realismo. Su apartado gráfico hubiera dado mucho más de sí si el ‘popping’ y algunas texturas de anterior generación no hubiesen empañado el conjunto. Las físicas por su parte han mejorado muchísimo respecto a anteriores entregas con unas superficies mucho más efectivas, sin embargo, aún queda mucho trabajo por delante con otros aspectos como el impacto con el entorno que a veces se antoja de lo más surrealista, echando a perder una gran etapa por un simple roce con un objeto que no debería ser tan duro.
¿Un apartado gráfico sin alardes y los problemas con las físicas hacen de este un juego poco recomendable? En absoluto. Aún así, WRC 8 mantiene el tipo con un título de lo más divertido que nos brinda un modo carrera imprescindible cargado de contenido suficiente para mantenernos pegados a la pantalla durante mucho tiempo. Su dificultad ayudará a ello, ya que nos desafiará para superarnos constantemente. Es duro, pero quién dijo que ser el mejor piloto iba a ser un camino de rosas.
Conclusión
Salvando sus defectos, WRC 8 es un título muy recomendable para todos aquellos aficionados al Rally que quieran disfrutar de un campeonato oficial de lo más completo gracias a sus opciones de gestión y a la cantidad de contenido que alberga.