Si pensamos en uno de los universos más ricos en cuanto a contenido, seguramente Warhammer sea uno de ellos, ya que actualmente cuenta con innumerables historias contadas en novelas, videojuegos y otros muchos medios que no hacen más que ampliar enormemente el contenido al que podemos acceder todos los fans de esta licencia. Si nos centramos en el tema que nos abarca, son muchos los videojuegos que han llegado a Xbox bajo dicha franquicia, siendo Warhammer End Times Vermintide el primero en llegar a Xbox One, ofreciéndonos un interesante título que recuerda en muchas ocasiones al mítico Left 4 Dead de Valve pero esta vez bajo la funesta ambientación de un reino asolado por los letales Skavens.
Esta vez, el género en el que se centra Mordheim: City of the Damned, el nuevo videojuego de la saga Warhammer, es muy distinto a la acción que nos propone Vermintide, llevándonos a nuestra consola después de un año desde el lanzamiento de la versión para compatibles, un juego de rol por turnos táctico que hará disfrutar a los más seguidores de la saga. La encargada de ello es la desarrolladora canadiense Rogue Factor que se estrena con la ayuda de Focus Home Interactive.
Mordheim fue durante un largo periodo de tiempo una prospera ciudad que amasaba una gran fortuna gracias al comercio, hasta que la corrupción y la codicia hizo que poco a poco el pecado se adueñase de ella, esto no gustó a los dioses, por lo que devastaron y convirtieron la ciudad en un auténtico infierno en la tierra, valiéndole del nombre de la ciudad de los condenados. Bajo esta premisa comienza el título de Rogue Factor que no logra aprovecharla para ofrecernos una historia que estuviese al nivel de lo esperado, centrándose plenamente en lo que jugablemente nos puede llegar a ofrecer.
La complejidad del juego será bastante elevada y para ello, se nos ofrece la posibilidad de completar un extenso y detallado tutorial que nos enseñará los conceptos básicos del título, sin embargo, debido a la gran información que recibiremos, la mayoría de jugadores que no sean experimentados en el género de rol táctico verán que se les puede llegar a hacer algo grande, por lo que no entenderán muchos de los detalles que se explican, mermando así la experiencia final a la hora de entrar en la batalla.
Antes de comenzar con nuestra aventura en la tenebrosa ciudad de Mordheim, debemos elegir una de las bandas que aún siguen poblándolas siendo los Skavens, Mercenarios del Imperio, las Hermanas del Sigmar y los temibles seguidores del Culto de los Poseídos, los que podemos elegir para enfrentarnos a todos los peligros que nos esperan. Cada una de estas bandas contará con un gran número de habilidades y unidades exclusivas que harán de estas una experiencia completamente diferente entre ellas. Una vez elegida la banda que gestionaremos, asumiremos el control de esta para llevarla al éxito comprando nuevos guerreros, personalizando su equipo, atributos, etcétera. Todo ello será completamente necesario para salir airosos en las duras batallas que nos esperan donde la muerte de cada personaje es permanente, esto hace que cada paso que demos no sea en balde ya que valoraremos muchísimo la vida del que controlemos. Estos personajes no solo pueden morir de forma permanente, sino que también sufrirán enfermedades y lesiones que debemos curar una vez haya terminado el enfrentamiento.
Las batallas de Mordheim: City of the Damned serán similares a las de su juego de tablero, con la diferencia de que dicho tablero será un escenario recreado en tres dimensiones donde podemos organizar nuestras propias emboscadas en los turnos que nos pertenezcan. Como mencionamos anteriormente, en este juego no gozaremos de una libertad total de movimiento ya que nos regiremos por los límites de avance y ataques que se nos otorga por cada turno. Nuestro objetivo principal no será simplemente acabar con los enemigos, sino que también debemos saquearlos y recoger los máximos objetos posibles para después usarlos en la mejora de nuestra propia banda. Dependiendo del tipo de misión que logremos completar, esta tendrá una recompensa completamente diferente que nos servirá para aumentar nuestro rango del llamado sistema de veteranos donde desbloquearemos bonificaciones y habilidades nuevas para nuestros combatientes.
Las misiones que componen la campaña de la ‘Ciudad de los Condenados’ se generarán de forma aleatoria y para desbloquearlas debemos contratar a un explorador que nos irá descubriendo nuevas localizaciones para dar rienda suelta a nuestra devastadora estrategia. Algo que no llegamos entender en este juego, es que estas misiones tienen la fuerte restricción de ser diarias, por lo que no podemos jugar a la campaña todo lo que queramos en un mismo día. A pesar de ello, contaremos con las escaramuzas que es el componente multijugador del juego donde mediremos nuestras fuerzas con los jugadores del mundo en un modo que también contará con las lesiones y muertes del individual a no ser que elijamos la escaramuza de exhibición, cuyo objetivo es entrenarnos para los futuros combates a muerte.
El importante recalcar que Mordheim es un juego bastante exigente no solo por su elevada dificultad y la muerte permanente, sino también por la gran complejidad que presenta su estilo de juego en el que contaremos con cientos de opciones a la hora de atacar y defendernos de los enemigos. Nuestra capacidad de mejorar el equipo de la banda y plantear el combate será vital para que no perdamos todo lo conseguido.
Como podrás comprobar llegados a este punto del análisis, Mordheim: City of the Damned tiene muchas virtudes que lo convierten en una opción más que recomendable, sin embargo, no está libre de aspectos bastantes mejorables como el apartado gráfico y diseño de niveles que presenta, estando el primero al nivel de lo visto en la anterior generación de consolas, los niveles por su parte a pesar de ser muy complejos y facilitar unas partidas de lo más emocionantes, no presentan un diseño visual destacable debido a la repetición excesiva de algunos modelados. Por otro lado, la cámara no ayudará en absoluto ya que en ocasiones presentará un comportamiento algo desajustado que debería de haberse solucionado y por último, y no menos importante, el juego a pesar de llegar con los textos en español, en ocasiones aparece en italiano algo que claramente podrían haber evitado.