Apple ha estado en el centro de varias polémicas en las últimas semanas, afectando tanto a los servicios de Cloud Gaming como al popular juego Fortnite. La pugna con la Apple Store ha sido fuerte, pero poco a poco parece que se está llegando a un acuerdo para que servicios como Google Stadia o xCloud, ahora conocido como Xbox Game Pass Ultimate, lleguen también a sus usuarios. Con ello, se podría decir que Apple abre la mano a xCloud pero con condiciones, que son bastante peliagudas.
El conflicto con estas plataformas de Cloud Gaming era adaptarse a las condiciones que expone el fabricante de la manzana a la publicación de aplicaciones en su tienda. Las plataformas de Cloud Gaming son una aplicación que daría acceso a otras aplicaciones. Y ahí, Apple dijo que debía pasarse un control para con cada una de ellas, lo que es un problema grande al tener que pasar los filtros de publicación para cada juego incluido en el servicio.
La última actualización del sistema operativo de Apple habría incluido una nueva cláusula por la cual los servicios de Cloud Gaming están permitidos. Este primer paso es importante, porque es una clara intención de Apple de intentar adecuarse a las nuevas tendencias. No obstante, Apple abre la mano a xCloud pero con condiciones. Y es que pese a que se va a poder hacer uso del servicio, según se ha expuesto, cada uno de los juegos deberá aparecer listado dentro de la tienda como un producto separado.
En el caso de Xbox Game Pass Ultimate, anteriormente conocido como xCloud, para un catálogo de más de 100 juegos, esa exigencia puede resultar un auténtico problema. Y es que para poder jugar a un juego, más que hacerlo a través de la aplicación de Microsoft, se deberá descargar una especie de acceso directo para ejecutarlo. Que deba surgir una lista de productos individuales por cada juego que se publica dentro de xCloud o Google Stadia, va a eternizar una búsqueda o puede resultar complicado de gestionar cuando un usuario busca un juego. Cierto es que este problema no afectaría tanto a los servicios, que ahora podrán tener un nuevo escaparate y un nuevo mercado.
Y en cierto modo se mantiene la pugna que Google y Microsoft mantienen abierta con Apple por cómo funciona su servicio. Según los parámetros de la tienda, que un producto aparezca listado en ella requiere de que tengan «algunas funciones básicas cuando se descarguen». En estos casos, hablamos de una retransmisión del juego que se está ejecutando de forma remota en otro hardware, no implicando al hardware en el que se está jugando. Aún así, es la exigencia de Apple que los juegos que se incluyen en estos servicios deban aparecer listados de forma independiente.
Da la sensación de que Apple se ha encontrado en una encrucijada en la que no ha querido salir perdiendo por tener que ceder. Se ha actualizado, dando cobertura a un servicio que está en auge y que sus usuarios podrían reclamar. Ahora bien, para no quedar en mal lugar, ha puesto una condición que pretende dejar claro quien manda en su sistema. Sea como fuera, lo que queda es que Apple abre la mano a xCloud pero con condiciones bastante peliagudas, que van a afectar más al usuario, que al propio servicio.