Se acaba el año y toca hacer balance del rendimiento general de nuestra consola, Xbox One, a lo largo de los meses de este 2016. Parecía que iba a ser un temporada floja para la consola de Microsoft, sin embargo, ha conseguido hacerse con unos números impresionantes en cuestión de ventas, sobre todo, para rematar este periodo. Empecemos por el principio de este apoteósico año 2016 de Xbox One. No hemos estado exentos de buenos juegos, novedades en cuanto a hardware y noticias que caen con cuentagotas sobre la esperadísima Project Scorpio y la revolución que quiere traer a la industria.
Exclusivos enriquecedores
Remedy Entertainment nos deslumbraba con su nueva propuesta, una historia con un profundo y trabajado guión que nos dejaba atónitos frente a este coloso gráfico. Quantum Break nos proponía dominar el tiempo a nuestro antojo con poderes sobrehumanos de la mano de un elenco soberbio. Remedy innovaba proponiendo entrelazando un interesante shooter en tercera persona con una serie de acción real con actores de primera categoría.
Tuvimos que esperar unos meses para recibir otro juego exclusivo para Xbox One en este año 2016. Llegaba Inside, un título de corte indie desarrollado por Playdead Studios, padres de Limbo. Su lúgubre y característica historia profanaba cualquier mente con su narrativa carente de diálogos, el final podía dejarte pensando durante días. Tal ha sido su repercusión que ha conseguido la nominación a mejor juego del año en The Game Awards. Aunque Inside ya no cuenta con la exclusividad sí fue durante un tiempo solo de Xbox One y vio nacer su éxito en la consola de Microsoft.
A lo largo del E3 2016 pudimos disfrutar de anticipos de interesantes propuestas que dotan a la marca de personalidad. We Happy Few es uno de los juegos más interesantes que pudimos ver en la feria de Los Ángeles, los usuarios de Xbox One hemos podido disfrutar de su proceso de beta mientras el título sigue en desarrollo de mano de Compulsion Games. Promete traer a la consola un proyecto lleno de aire fresco que no se parece a nada de los visto hasta ahora.
Ya en septiembre llegaba un juego que ofrecía algo que Xbox One necesitaba, un plataformas a la altura. ReCore llegaba aportando frescura al catálogo de Xbox One con un título con aires de vieja escuela y con una dificultad que supondrá todo un reto. A través de un mundo postapocalíptico, desértico y plagado de robots tendremos que resolver un misterio para ayudar a lo que queda de la humanidad a encontrar un nuevo hogar.
Septiembre no terminó aquí y otro gran exclusivo de la consola llegaba para darnos velocidad y frenetismo, Forza Horzion 3 se presentaba en Xbox One. Una auténtica bestia técnica y demasiado divertida para no pararse a echar unas carreras por la bella Australia, llena de contrastes y de detalle.
En octubre por fin llegaba una nueva entrega de una de uno de los buques insignia de Microsoft, Gears of War 4. Con una historia mucho más profunda y oscura, The Coalition ha llevado a la saga a un nuevo nivel en el que se pueden explotar varios aspectos. Con una campaña y un multijugador brutales, Gears of War 4 es uno de los mejores títulos de la temporada.
Para terminar el año se presentaba en nuestras pantallas Frank West, el protagonista de Dead Rising 4. El reportero más carismático de la saga está de vuelta por Navidad para destrozar zombies en el centro comercial. Unas fiestas sangrientas, llenas de color y villancicos clásicos al ritmo de Frank Sinantra son el broche perfecto para un año colmado de regalos.
El portentoso sistema de retrocompatibilidad de Xbox One
Otra de las grandes bazas de este año para Xbox One ha sido el sistema de retrocompatibilidad. El catálogo no ha hecho más que crecer y crecer, ofreciendo variedad para todos los gustos y títulos de una calidad inigualable. Algunos de los juegos más esperados por la comunidad han llegado, por fin, a nuestras consolas, Red Dead Redemption, Bayonetta, la saga Bioshock al completo o Bully. De esta manera podemos jugar todo lo que nos quedaba pendiente de la pasada generación sin la necesidad de cambiar de máquina, incluso los que no han tenido la oportunidad de jugar a determinados títulos y tienen One, ahora pueden disfrutar también de los juegos de Xbox 360. El año del sistema de retrocompatibilidad se ha coronado ofreciendo al usuario todas estas características, incluso, desde Microsoft, presumen de regalas títulos de culto como el fantástico Lost Oddysey. Ya son más de 300 títulos los que avalan al sistema de retrocompatibilidad que tan buenas migas está haciendo con los usuarios de la marca.
La familia crece
En aspectos de hardware, la compañía, no se ha quedado corta. Este ha sido uno de los mejores años en ventas de Xbox One, haciéndose con el primer puesto en las listas de las más vendidas en varios países como Reino Unido, Australia o Estados Unidos. Esta subida en las ventas se ha debido a una gran máquina que se presentó en el pasado E3 y que ha sido determinante para el futuro de la marca, Xbox One S ofrece unas características envidiables para cualquier máquina actual. El tamaño de Xbox One S es un 40% más pequeño que el de su antecesora, además ofrece un nuevo diseño más sobrio. Se han eliminado los botones táctiles que a veces encendían la consola al roce y se han sustituido por unos físicos más cómodos. Además cuenta con numerosas mejoras técnicas como la reproducción de vídeo a 4k.
Los mandos de Xbox siguen dominando el mercado. Con el lab ahora podemos crear todas nuestras combinaciones y diseñar un mando a nuestro gusto para llevarlo a casa. El mando Elite sigue siendo el mejor periférico que puedes encontrar en una consola. Los usuarios que tienen la suerte de disponer de él se deshacen en alabanzas y ya es uno de los accesorios más vendidos para una consola. A pesar de su elevado precio es el mejor mando con el que puedes jugar a todos los títulos de Xbox One de este 2016.
Lo que nos espera en 2017
A lo largo del próximo año nos esperan grandes cosas a los usuarios de Xbox One y de la marca en general. Títulos exclusivos están por llegar como Crackdown 3, Scalebound o Cuphead, además para finales de 2017 llega algo que todos esperamos con ansia, Project Scorpio. La nueva consola de Microsoft tendrá 6 teraflops de potencia y promete ofrecernos puro juego a 4k. Tal y como explican los directivos de la marca Xbox, Scorpio es una máquina de alta gama que pretende adaptarse al mercado ofreciendo un precio asequible para todos aquellos que quieran experimentar un tipo de juego más profesional. Project Scorpio, de la que pocos detalles se conocen, va a darnos un gran año 2017 que empieza en apenas unos días.