Con el paso de los años, la legendaria y longeva franquicia en propiedad de Ubisoft, Assassin’s Creed, había experimentado una notable evolución en su estilo de juego, pasando de una trama lineal en un mundo abierto a implementar elementos más propios de los juegos de rol. Sin embargo, el reciente lanzamiento, Assassin’s Creed Mirage, demuestra que la serie no necesita ser un RPG para tener éxito.
Como ya te contamos en nuestro análisis completo, Assassin’s Creed Mirage ha vuelto a sus raíces al centrarse en el sigilo y la infiltración, en lugar de apostar por la acción ruda y el combate masivo. En la historia de Bassim en Bagdad, se insta a los jugadores a adaptar su enfoque, utilizando el entorno a su favor y empleando tácticas de sigilo en lugar de enfrentamientos directos.
Assassin’s Creed Mirage conserva la identidad única de la franquicia
El tamaño del mapa en Mirage es el adecuado, algo que permite a los jugadores explorar con flexibilidad sin sentir que están perdiendo el tiempo o abrumándose ante una cantidad excesiva de contenido y actividades dentro de él. Además, el juego fomenta la exploración tanto desde las alturas de los tejados como en los rincones menos desarrollados de la ciudad.
Una de las características más destacadas es la forma en que el juego aborda las misiones secundarias. En lugar de aparecer como simples tareas aisladas y de relleno, se integran de manera coherente dentro de la trama principal. Con esto Ubisoft logra aportar profundidad y significado a la experiencia de juego, sin convertir a nuestro personaje en el recadero de Bagdad.
A pesar de que algunos de estos elementos pueden recordar a los típicos que encontraríamos en un juego de rol, Assassin’s Creed Mirage sigue manteniendo una narrativa central y un enfoque en la historia de su protagonista, Bassim. Esto demuestra, tanto a Ubisoft como a los jugadores, que la serie puede tomar características prestadas de los RPG sin perder su identidad única.
Assassin’s Creed Mirage marca una pauta en la serie al demostrar que no es necesario abrazar por completo el género RPG para mantener su éxito. Esta entrega representa un regreso a las raíces de la franquicia, enfocándose en el sigilo, una rica narrativa y misiones secundarias significativas.
A medida que la serie evoluciona, puede hacerlo sin sacrificar su identidad única, y Mirage ofrece un emocionante vistazo al futuro de Assassin’s Creed. La franquicia continúa siendo una IP destacada, ofreciendo a los jugadores una experiencia en constante evolución que sigue siendo fiel a su legado.