Desde que Assassin’s Creed: Origins se presentara en la conferencia de Microsoft en el pasado E3 2017, y se enseñara una demostración corriendo en Xbox One X, todos los aficionados se han preguntado lo mismo. ¿Qué beneficios va a aportar el nuevo y potente hardware de la maquina de Microsoft a la última a ventura de los asesinos?
Pues bien, después de que la actualidad pusiera en duda la resolución nativa del título, es ahora cuando Ubisoft, responsables de la saga Assassin’s Creed, ha compartido cuales son las mejoras exactas que sacarán beneficio del potencial de la nueva revisión de Xbox One.
Assassin’s Creed Origins detalla su historia en un impresionante trailer
Lo primero que han querido dejar claro es que los poseedores de una televisión 4K podrán disfrutar del titulo en su máximo esplendor a esta resolución, sin importar cual sea la resolución nativa del juego. Por potra parte, el usuario que posea una televisión 1080p, gozará de una calidad visual más limpia y definida gracias a la técnica del downsampling que se ejecutará de manera automática. Ambas versiones, por supuesto, gozarán de las mejoras del HDR para obtener unos colores más vivos y nítidos.
«Gracias a la gran cantidad de memoria y a la CPU más potente«, afirman desde Ubisoft, podremos disfrutar de una distancia de dibujado, dos veces superior a la de la versión estándar de Xbox One sin perder calidad en el modelado de las arquitecturas o la vegetación. Esta mejora en la memoria de la máquina, aseguran los creadores del título, permitirá mejores tiempos de carga y transiciones en el cambio de personaje entre nuestro protagonista, Bayek, y su fiel compañero, Senu.
Finalmente, Assassin’s Creed: Origins será uno de los primeros juegos en sacar provecho a Dolby Atmos y ofrecer una mejor fidelidad sonora a la que estamos acostumbrados.