Resulta que un problema del que muy pocos son conscientes es del hecho de que la pasta térmica de las consolas debe ser cambiada. Y aquí les brindaremos una guía rápida de qué se debe tener en cuenta para cambiar la pasta térmica de tu Xbox en casa. Lo cierto es que este es un proceso que puede ser complicado en los grandes detalles, y delicado en los pequeños. Después de todo, para cambiar la pasta térmica de tu Xbox deberás abrir tu consola y tener acceso a partes bastante sensibles de esta.
Con esto quiero decir que si prefieres no tomar riesgos, llevarla donde un experto será quizás la más sabia de las decisiones. Pero si eres de los que prefiere hacer las cosas por sí mismo, o quieres ahorrarte la pasta del servicio técnico, esta pequeña guía podría darte una idea de lo que tienes que considerar cuando vayas a cambiar la pasta térmica de tu Xbox. Que, valga la pena decir, debe ser cambiada con cierta periodicidad.
Hay quienes recomiendan cambiar la pasta térmica de tu Xbox (o de cualquiera de tus consolas) cada 6 meses. Seguramente esto es una exageración, y también depende de la pasta térmica que uses. Pero es algo que debes tener en cuenta. Por lo menos debes saber que las consolas no suelen traer una buena cantidad de pasta térmica, y que es recomendable que luego de que ya no tenga garantía, evalúes el desempeño de tu consola en cuanto a la disipación del calor, crasheos y apagados inesperados. Luego de 4 años de uso constante, cambiar la pasta térmica de tu Xbox será, muy seguramente, una necesidad.
Cómo cambiar la pasta térmica de tu Xbox
Esta pequeña guía servirá de base para el proceso como tal de cambiar la pasta térmica de tu Xbox, dejando de lado el proceso de desarmado inicial de la consola. Explicaré, sin embargo, los últimos pasos del proceso de desarmado para acceder al CPU y la aplicación de la pasta térmica. Hay unos materiales básicos que deberás tener a mano. En Amazon puedes encontrar un Kit de destornilladores, que incluye destornilladores T6/T8/T10, y herramienta de palanca abierta, cepillos y caja de depósito.
En cuanto a la pasta térmica que necesitarás, puedes escoger la de tu preferencia. Pero una de las más recomendadas MX-4 que también puedes comprar en Amazon. También necesitarás alcohol isopropílico y bastoncillos.
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Acceder al procesador
Desarmar cualquier Xbox (de pasada generación) para cambiar la pasta térmica de tu Xbox es un proceso relativamente sencillo. Muchos de los videos que podremos encontrar en Youtube enseñan esto paso a pasa, lo que aquí dejaremos de lado para no extendernos innecesariamente en este tutorial. Lo cierto es que con el kit de herramientas que recomendamos tendrás todo lo necesario para acceder al interior de tu Xbox y remover la placa del soporte metálico interior. Cuando solo tengas la placa de tu Xbox en tu mano, los pasos a continuación funcionan de la misma manera para una Xbox One S y una Xbox One X. Estos son los pasos que debes seguir para acceder a tu procesador:
- Se debe tomar la placa desde el disipador y darle la vuelta completamente
- Al otro lado encontrarás una pinza que es lo que sostiene el disipador. Esta pinza lo sujeta a presión
- Debes introducir uno de los destornilladores delgados por el hueco que existe entre la pinza y el tope (hay en total 4)
- Se debe hacer fuerza, aunque con mucho cuidado, en forma de palanca en cada uno de los 4 huecos hasta que la pinza se separe.
- Debes girar la placa de nuevo y desconectar el ventilador. Esto se hace halando un pequeño plug que está en una de las esquinas de la placa junto al ventilador.
- A continuación podrás remover el disipador.
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Créditos iFixit
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Aplicar la pasta térmica
Estos son los pasos que verdaderamente importan para realizar el proceso de cambiar la pasta térmica de tu Xbox.
- En este punto deberás poder observar el procesador cubierto por la pasta térmica que vas a remover.
- Humedece los bastoncillos en alcohol isopropílico y con suavidad y constancia remueve los residuos de la pasta anterior. Parte de estos pueden estar adheridos al disipador que va adherido al procesador.
- Luego deberás aplicar la pasta térmica desde el aplicador sobre tu procesador. No siempre se debe gastar todo lo que viene en el aplicador, de hecho, la mayoría de las veces con la mitad o menos bastará.
- Luego de aplicarlo deberás utilizar la espátula plástica, con la que podrás esparcir uniformemente la pasta térmica.
- Importante: la pasta térmica debe quedar sobre el procesador, completando toda su superficie.
- Una vez se haya logrado esto pasa a poner el disipador en su posición y armar de nuevo la consola.
Estas explicaciones pueden no ser del todo claras, por lo que siempre es posible remitirse a este video de Retro Renova donde pueden ver el proceso de cambiar la pasta térmica de tu Xbox en acción. En el video lo hacen específicamente con una Xbox One S pero en el canal podrán verlo también con una Xbox One X.
