Los videojuegos han estado cambiando. Hace mucho tiempo que han dejado de ser «una cosa de niños» o una mera distracción para evolucionar en todo un arte con múltiples visiones que se ciernen sobre nosotros. Para muchos son un refugio, para otros un lugar perfecto para compartir con los amigos y disfrutar de una buena historia, al nivel del cine, o de un multijugador absorbente. Cyberpunk 2077 es madurez para el medio. Hace un par de días podíamos ver un intenso gameplay de lo nuevo de CD Projekt RED. El estudio polaco se mostraba reticente a enseñar al gran público el desarrollo de su trabajo. Sin embargo, no querían decepcionar a los fans que lo estaban esperando como agua de mayo.
Distopía en cine y literatura
Así que, por fin, se produjo el milagro. CD Projekt RED nos ha dejado ver un poquito de gameplay. 48 minutos para ser exactos, de lo que será Cyberpunk 2077. Al menos en ideas generales ya que el título cambiará de aquí a su día de estreno. Lo que hemos visto nos ha encantado y solo podemos describirlo en una palabra: madurez. El estudio siempre se ha interesado por presentar proyectos pulidos y con una calidad desorbitada en sus acabados. Ya pudimos comprobarlo en su fantástica trilogía basada en las novelas de fantasía del, también polaco, Andrzej Sapkowski. Presentaron tres juegos que tuvieron como colofón final a The Witcher III: Wild Hunt. Este juego es una oda a la madurez argumental, narrativa y de expresión.
CD Projekt RED se caracteriza por cuidar a sus usuarios. Los contenidos que ha añadido para su juego estrella han aportado una calidad y una extensión a las hazañas del brujo que están a otro nivel. De hecho, muchas compañías deberían tomar esta hoja de ruta a la hora de añadir contenido a sus títulos.
Más allá de eso, centrémonos en el presente. Cyberpunk 2077 es el ahora. Ya sabemos muchas cosas sobre lo que nos espera en Night City, esta ciudad va a darnos total libertad en un inmenso mundo del caótico futuro de la Humanidad. Tras ver el gameplay solo huele a madurez, se atreve a plasmar lo que es la corriente cyberpunk en su totalidad. Haciendo un repaso por el pasado podemos encontrar multitud de textos que nos revelan, o recuerdan, las bases de esta tendencia. Los inicios del cyberpunk datan de comienzos del siglo XX, gracias a novelas como Un Mundo Feliz, de Aldous Huxley, o 1984, de George Orwell. Fueron algunos de los primeros pasos para que germinara esta corriente distópica que se alejaba del «buenismo» de la ciencia ficción hasta la fecha.
Uno de los pilares del cyberpunk es la novela. ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip K. Dick esescrito que se tradujo en la gran pantalla como Blade Runner. Todo un hito de la ciencia ficción decadente. Un gran éxito que ha estrenado hace poco una secuela, Blade Runner 2049.
Cyberpunk 2077 y la madurez a través de su gameplay
El cyberpunk está basado en la decadencia de la sociedad en un futuro lejano, o no tan lejano. Es lo que llamamos una distopía en toda regla. También toma como fuentes de energía la informática o las nuevas tecnologías. También las drogas como método de evasión de un mundo que ya no aporta nada para la esencia humana. El cuerpo se ha convertido en algo accesorio, llenos de implantes o mejoras. Los humanos ya no consideran al contenedor de carne y huesos como algo sagrado. Todo se ha profanado por medio de la tecnología y la importancia que se le otorga al cuerpo ha cambiado. La carne es un nuevo hogar para aumentos que mejoran las características humanas. El pudor y la inocencia ya no conectan con la imagen de un cuerpo desnudo.
Esto mismo es algo que se puede leer, y ver, en literatura y películas del género distópico y cyberpunk. De hecho, CD Projekt RED lo ha explicado en alguna ocasión. En una interesante entrevista de Adam Badowski, director de Cyberpunk 2077, podemos leer esta conclusión:
«La desnudez es importante para nosotros por una razón. Esto es cyberpunk, por lo que las personas realizan aumentos en su cuerpo. Entonces el cuerpo ya no es algo sagrado, se convierte en algo profanado. Debido a que las personas modifican todo están perdiendo su conexión con el cuerpo, con la carne. Y es por eso que necesitamos usar la desnudez en muchas situaciones «.
La desnudez no es otra cosa más que mostrar lo que es el cyberpunk que tanto hemos leído y visto. Se trata de madurez en estado puro, de entender que el cuerpo es algo secundario, pasa de ser un templo a ser un instrumento que apenas importa al que lo posee. El único anhelo es conseguir uno de esos aumentos para ser mejores. El cuerpo es nada. Por eso pienso que el mostrar un desnudo, de un hombre o de una mujer en esta obra de CD Projekt RED es algo completamente necesario. Es esencia del cyberpunk, no es un reclamo de absolutamente nada más que de mostrar lo que lleva años cociéndose en otro géneros. De hecho, nadie debería escandalizarse por ver un cuerpo desnudo en según que medios pero esa es otra historia.
Crudeza de un futuro caótico
Claro que la madurez no se encuentra solo en los desnudos. Cyberpunk 2077 muestra una historia cruda, al menos por lo que hemos podido saborear en su gameplay. Somos V y tenemos una vida turbulenta más allá de nuestro trabajo, no menos truculento. En la demo que mostró el estudio polaco vemos cómo ha tenido una noche bastante movida con un hombre que aparece desnudo y marchándose del piso de la protagonista. Eso deja entrever que V recurre a un sexo superficial en el que utiliza, en mayor o menor medida, a ciertas personas. También se puede observar cómo recurre a una botella de alcohol, vacía, a primera hora de la mañana.
No hay duda, Cyberpunk 2077 está a otro nivel de madurez del que tenemos mucho que descubrir todavía. Los videojuegos siguen creciendo en contenido e intensidad argumental. Algo que muchos adoramos, ojalá que sigan evolucionando de esta manera que está demostrando CD Projekt RED durante muchos años.
No sé si será el mejor juego al que me he enfrentado, si lo adoraré o lo odiaré. Solo sé que la propuesta del estudio va más allá y rompe los límites establecidos, un nuevo paso para romper con la frontera de esa madurez que tanto buscamos.