Aunque es una gran noticia, todos nos sorprendimos al saber como el acuerdo con Sony por Call of Duty fue firmado por ambas partes de una vez por todas, luego de unas cuantas negociaciones que no llegaron a buen puerto. Si bien esta es una realidad, marcando el inicio del fin de un largo trayecto por la compra de Activision Blizzard, viene bien esclarecer algunos puntos detrás de este acuerdo, ya que se pueden formar ideas no ajustadas a la verdad.
Sabemos que Sony ha llegado a un acuerdo legal con Microsoft, asegurando que Call of Duty se mantenga en su sistema por un buen tiempo. Si se tiene buena memoria y algo de recorrido en este tema tan extendido y mediático, será fácil recordar que Microsoft realizó multitud de acuerdos con muchas empresas importantes del sector del videojuego, pero con la primera que lo intentó fue con Sony, quien en su momento no aceptó.
El acuerdo con Sony por Call of Duty se limita al popular shooter de Activision
Según señala el periodista Tom Warren, la oferta inicial (al menos de la que se tiene conocimiento) de Microsoft con Sony, en enero de 2022, rezaba que todos los títulos vigentes de Activision Blizzard actualmente en las consolas de Sony , así como sus potenciales secuelas o continuaciones, se mantendrían en ellas hasta el 31 de diciembre de 2027. Si comparamos las dos ofertas, esta era más escueta con el margen de tiempo, de tan solo 4 años.
Microsoft has confirmed to The Verge that Sony's 10-year Call of Duty deal is limited to CoD. Microsoft originally offered to keep "existing Activision console titles on Sony”, including future versions of current Activision games on PS till end of 2027 https://t.co/yq4GadNGAi pic.twitter.com/OtmbylAGv7
— Tom Warren (@tomwarren) July 16, 2023
¿Entonces Sony buscaba 10 años en lugar de solo 4? Aunque esta bien pueda ser una razón de peso, lo cierto es que la coyuntura actual es, con toda certeza, la principal razón por la cual Sony acepta este trato. La compra de Activision Blizzard es inminente, y es mejor para Sony aceptar algún acuerdo antes de la transacción. También cabe aclarar que, a diferencia del acuerdo de principios de 2022, el actual solo se limita a mantener Call of Duty en las consolas de Sony por 10 años, y ninguna otra saga más.

Como bien se puede ver, y a pesar de alguna declaración desafortunada, Call of Duty es de vital importancia para el ecosistema de PlayStation, y perderlo de golpe, sin una suerte de transición planificada, sería desastroso para el negocio. Sony se suma así a Nintendo y Nvidia, quienes tuvieron también la oportunidad de llevarse beneficios frente a esta controvertida compra que parece culminar de una vez por todas.