La tercera temporada de The Witcher ha llegado recientemente a su fin, lo que supone el adiós definitivo de Henry Cavill de uno de los grandes activos de Netflix. Aunque la compañía norteamericana ha cumplido con su palabra de ser más fiel a los libros en esta última tanda de episodios, las valoraciones de los usuarios siguen cayendo en picado. Y puede que haya un buen motivo para ello.
Y es que ahora el productor de The Witcher ha asegurado que la serie es simple porque no confía en la inteligencia de la audiencia. Tomek Baginski lo ha hecho en una charla con el portal polaco Wyborcza, donde ha explicado el porqué de la simplificación de muchas de las tramas de la serie señalando a un claro culpable: el público estadounidense.
The Witcher es simple porque Netflix no confía en la inteligencia de la audiencia
Estas han sido las polémicas palabras de Baginski que están dando la vuelta por las redes sociales e indignando a los fans de The Witcher de todo el mundo.
“Cuando se hace una serie dirigida a una gigantesca audiencia con diferentes experiencias, de diferentes partes del mundo y una gran parte de ella son estadounidenses, estas simplificaciones no solo tienen sentido, sino que son necesarias. Es doloroso para nosotros, y también para mí, pero un nivel más alto de matices y complejidad tendrá un rango menor, no alcanzará a tanta gente. Tal vez a veces hayamos ido demasiado lejos, pero tenemos que tomar estas decisiones y aceptarlas”.
Baginski, lejos de quedarse ahí, ha profundizado en la cuestión.
“A veces los cambios resultan en caos en la producción; por ejemplo, un actor enferma y su trama necesita ser editada y reescrita en unas pocas horas para que pueda ser rodada al siguiente día porque no es una trama por la que toda la maquinaria de la producción pueda detenerse. Hay muchas razones entendibles de por qué las decisiones controvertidas se toman, pero el espectador no tiene este contexto, de modo que en ocasiones duele porque algo era mejor en los libros”.
El portal Redanian Intelligence refresca una entrevista anterior a Baginski en la que ya se refería a esta cuestión y señalaba concretamente a las nuevas generaciones y su forma de consumir contenido.
“Las audiencias cambian, todo cambia. Nos resignamos de las cadenas causa-efecto a una narración lineal. En lo que respecta a las series, cuanto más joven es el público menos significativa es la lógica de la trama. Solo importan las emociones. Una mezcla de emociones puras. Esta gente ha crecido en TikTok y YouTube, saltan de vídeo en vídeo. Es hora de ponerse serios. Queridos niños, lo que os hacéis a vosotros mismos os hace menos preparados a contenidos largos, a largas y complicadas cadenas de causa y efecto”.
Recuerda que la tercera temporada de The Witcher ya está disponible en Netflix y que la compañía norteamericana ya trabaja en un spin-off de Los Ratas y una película anime de Essi Daven.