Hemos tenido la oportunidad de adelantarnos al lanzamiento y hemos jugado a EA Sports F1 24. De este modo, os podemos traer un anticipo de lo que en apenas una semana os vais a encontrar. Y es que puede ser el juego que aprovecha una de las licencias más atractivas dentro del mundo del motor y que tiene una nueva oportunidad de satisfacer la expectativas de los fans de este deporte. Ahondaremos en las principales características que pueden hacer que este juego pueda ser ese juego que muchos vienen deseando disfrutar.
Pero una de las cuestiones claras es la relativa a una esperada revolución en la saga. Sabiendo que el juego no hará uso de un nuevo motor gráfico y mantiene el motor Ego y las plataformas que suelen recibir este juego en los últimos años, se puede intuir que los cambios van a ser menores de lo esperado. Pero, ¿En qué situación se encuentra EA Sports F1 24?
Os ofrecemos nuestras primeras impresiones de EA Sports F1 24, un juego que busca sumergir al jugador en el rol de piloto de la Fórmula 1
Lo primero, ponernos en contexto. Porque la Formula 1 se ha convertido en un producto de masas, con una popularidad enorme y siendo tendencia muchos fines de semana. La llegada de un nuevo juego de la saga de Codemasters se anticipa como un posible título que va a tener que afrontar a una gran cantidad de jugadores, de todos los perfiles, sabiendo que la propia licencia es el reclamo principal. Contentar a todos esos jugadores se presume, algo complicado.
Y es que no solo tiene que afrontar satisfacer posibles nuevos jugadores de esos nuevos fans de esta competición. Tiene que afrontar muchos gustos y experiencias, como son también los que venimos jugando a los juegos de Formula 1 desde su época más arcade, o incluso, desde aquel primer título que desarrolló Codemasters.
Un apartado técnico sin revoluciones
Empezamos con lo más evidente. No hay un cambio de motor gráfico, con lo que tenemos un juego que mantiene una línea continuista. Aunque se note algo mejorado, puede ser uno de los aspectos que menos podamos destacar como incentivo para atraer al público a esta nueva experiencia. Pero ya cuando se confirmó que no cambiaban el motor era evidente que en este apartado no iba a haber revoluciones.
El haber recreado algunos circuitos que se habían quedado obsoletos, como Spa-Francorchamps, Silverstone o Jeddah, es solo parte de esa renovación visual de un juego que podía haber requerido una renovación técnica. Se puede notar que hay algunas cosas, como los modelados de los pilotos, que han mejorado. Pero como pasa en estas sagas, por algún motivo les cuesta demasiado plantear diferentes animaciones, incluso poder personalizar el avatar para que no sea algo demasiado estándar. Que luego vemos tres pilotos en el podio con la misma cara y queda raro.
Lo bueno, es que el juego no compromete la experiencia en este aspecto, sabiendo que es un juego que lucía bien en todas las plataformas, incluyendo la old-gen, con un rendimiento sólido. Se puede requerir más, obviamente, porque en algunos aspectos el juego sigue pareciendo el mismo que en los últimos años. Pero sabemos que, con la experiencia que tenemos con MotoGP, a veces eso es lo que menos importa que sea revolucionado.
Ajustes varios, pero nada que nos sorprenda en cuestiones técnicas. Luce bien, rinde muy bien, pero deberían haber hecho algo más
Un paraíso para el amante de las carreras y de la experiencia de piloto
Tras varios años con ciertas controversias sobre la experiencia, tras la llegada de Electronic Arts, grandes esfuerzos se han centrado en dinamizar las opciones para que haya diferentes formas de introducirse en la Formula 1. En esta ocasión, se ha vuelto a buscar una fórmula ganadora en este ámbito, donde el modo trayectoria es el que más se nutre de las nuevas tendencias que Codemasters quiere introducir en esta experiencia de juego.
Y es que, una de las cuestiones más interesantes es cómo se ha querido implicar al jugador en el modo trayectoria. Se ha querido ampliar el abanico de aspectos que permiten que la experiencia sea tanto una competición en pista, como fuera de ella. Todo sirve para justificar un sistema de prestigio y contrataciones que permitirá gestionar una carrera profesional de una forma un poco más completa. Y es que ahora tendremos más opciones fuera de pista, teniendo también que tener en cuenta nuevos objetivos cuando estamos participando en un fin de semana de Gran Premio.
Vamos a encontrar múltiples objetivos para implicarnos más que nunca en cada carrera, incluso, la competición logra llevarse fuera de la pista.
Aunque pueda dar la sensación que ese modo trayectoria de piloto sigue desaprovechando las categorías inferiores, que otorgan carreras de gran calidad, en esta ocasión puede tener algo de impacto por la elección de la escuela de pilotos. Por lo demás, sigue siendo algo que puede ignorarse. De hecho, parece que no se implican por que la mayoría prefiere elegir ir a Red Bull desde el primer momento. Así que, al final, lo que no ofrece gran cosa, no terminará por atraer al público, y seguirá siendo así.
Pero en esta ocasión no se tan sencillo como elegir un equipo y ganar. Hay que ganarse el asiento con un parámetro como es la valoración de piloto, que actúa a modo de prestigio. Con ello, cada paso que se da requiere de revisar objetivos y completar tareas para poder gestionar los contratos. Contratos que son una novedad bastante interesante y que nos expone a la necesidad de cumplir, tanto para ganar posición en la infraestructura, como para evitar que nos despidan. Hay una mayor gestión de los recursos del equipo, e incluso, la oportunidad de gestionar contratos con otros equipos que nos busquen. Algo que se venía necesitando y que tiene un potencial enorme de adquirir nuevas propiedades para enfatizar esta experiencia y hacer sentir el modo trayectoria como debe ser.
Y todo esto se puede ejecutar como un modo individual, pero también como parte de una nueva iniciativa multijugador con marcadores. Conocidos son esos eventos en el que los jugadores compiten en un marcador además de superar un desafío. Y es algo que, en esta ocasión, no se trata solamente de superar un escenario. Supone enfrentarse a una situación equivalente a la del modo trayectoria, con un piloto y equipos reales. Un addon interesante, que puede dar cierta variedad, así como la experiencia de Mi Equipo, donde no tenemos que afrontar el riesgo de ser despedidos, tanto como preocuparse de que nuestro equipo sea competitivo para rivalizar con el todopoderoso Red Bull.
Opciones que debieron llegar hace muchos años, permiten que la experiencia de piloto sea mucho más inmersiva
Coches que se han descrito como camiones y que requerían de un cambio
Otro de los aspectos de los que se ha venido hablando mucho desde las betas, es la conducción. Lo cierto es que todo lo que comentaron en el evento privado que tuvimos la oportunidad de atender, es que habían centrado sus esfuerzos en que la experiencia transmitiese lo mismo que ahora mismo transmiten los enormes coches de la F1. No tiene sentido seguir haciendo una experiencia continuista buscando acercarse a esa referencia del F1 20 que muchos valoran como la mejor de las últimas.
Pero los coches han cambiado, han crecido y eso se ha querido transmitir en una conducción que se nota extraña. Se nota muy distinta, y puede que con algunos matices que pueden ser controvertidos. Nos hemos centrado a jugar con el mando, que es posiblemente lo más habitual entre los jugadores de F1 en consolas, y la experiencia requiere de cierta adaptación y comprensión del comportamiento del coche. Deberíamos de probar cómo se siente con el volante, pero eso lo dejaremos para cuando hagamos el análisis dentro de unos días.
Siendo algo que puede ajustarse, la conducción se nota extraña, pudiendo ser por la condición de los monoplazas de esta temporada.
El coche muestra un comportamiento que en ocasiones puede resultar confuso, por que un vehículo que se siente algo tosco, ofrece un exceso de agarre considerable. De este modo, en algunas curvas, el coche pasa de costarle mantener la trazada, a rotar sobre su eje con demasiada facilidad. Para evitar ese efecto, parece altamente recomendable intentar dejar correr el coche y gestionar la trazada con el freno motor, volviendo a tener un grip, o agarre, demasiado poderoso en la salida de las curvas. Quitando todas las ayudas resulta un poco más desafiante, pero lo cierto es que el juego se nota menos drástico con el abuso del gas o del freno. Pero también se nota bastante delicado a la hora de saber mantener una línea rápida y gestionar bien otros recursos, como son las gomas.
Lo cierto es que este aspecto puede cambiar, como ya lo hizo en ediciones anteriores. A sabiendas de que hay un gran feedback de los pilotos que compiten en competiciones virtuales con este juego, es posible que ellos tengan en su mano aplicar ciertos cambios o que puedan adaptarse a esta conducción que, para los que son menos adeptos, pueden encontrar más accesible. Una decisión que no parece fácil considerando la situación de la licencia deportiva.
Podemos intuir que hay pasos importantes en el modo trayectoria, implicando incluso en multijugador en este modo. ¿Hacen falta más opciones?
No asumir riesgos, pero dar la sensación de ser mucho más que antes
El hecho de que nos hayan dado la oportunidad de probar este juego antes de tiempo, es que podemos dar estas primeras impresiones de lo que nos hemos encontrado. Y lo cierto es que sabemos que de aquí al lanzamiento pueden cambiar algunas cosas, en las que no hemos querido profundizar en exceso. Pero lo que podemos anticipar, es que en líneas generales EA Sports F1 24 parece querer seguir siendo un juego que aporte novedades más centradas en lo que los amantes de la competición pueden buscar.
No tendremos en esta ocasión un nuevo episodio de Braking Point, un modo que puede resultar gratificante por que ofrece una experiencia distinta, pero que podrían llevar a un nuevo nivel trasladando esas escenas y decisiones más relevantes en el transcurso de la trayectoria, en ese modo individual donde cada uno diseña su piloto. Han optado por otro tipo de novedad, centrada en ese modo que parecía poco personal, como era el Modo Trayectoria. Ahora, buscan que el jugador, se implique más con otras decisiones, y así transformarlo en un auténtico piloto.
De primeras, podemos anticipar que EA Sports F1 24 puede ser un juego realmente atractivo, con muchas posibilidades para hacer muy propia la experiencia sobre estos monoplazas, y que seguramente busque el tirón que esta competición ha tenido en estos últimos meses. Al fin y al cabo, parte del salseo que acompaña esta competición en los últimos años, pasa por algunas de esas características que se han incluido en esta ocasión. Veremos si pueden darle un impulso a este modo, que sigue pareciendo uno de los puntos más atractivos que ofrece esta saga.