La semana pasada nos vimos sorprendidos por la cancelación de Hyenas, pero todavía es más sorprendente enterarse de que Hyenas era el proyecto más importante para SEGA. Un desarrollo que ha dejado expuesta a la empresa, y también a la desarroladora, Creative Assembly, que se embarcó en un proyecto fuera de su zona de confort. De hecho, no son pocos los proyectos cancelados o paralizados, que tienen a grandes estudios implicados en propuestas multijugador.
Centrados en lo que atendemos en la información que ha publicado VGC, algunas informaciones apuntan a que Hyenas era el juego de mayor presupuesto que tenía SEGA en su line-up. Eso sí, no podemos negar que la situación está siendo complicada por que la cancelación de Hyenas es una de varios proyectos que tenía la editora en marcha.
El ser el proyecto más ambicioso de SEGA no le sirvió para caer en desgracia
En el caso de Hyenas, resulta interesante evaluar la situación general de un proyecto que después de 6 años de desarrollo, se haya cancelado al estar terminando el mismo. Recordemos, que uno de los motivos dados era que el proyecto no causó interés suficiente en su beta. Y como consecuencia, se decidió cerrar el grifo y cancelar el proyecto. Lo cierto, es que esta situación ya parece inédita viendo otros juegos que, pese a todo, fueron lanzados.
El estudio, Creative Assembly, elogiado por sus juegos de la franquicia Total War, estaba totalmente fuera de la zona de confort. Y puede que por ello, se apostó por este estudio, ya que Hyenas era el proyecto más importante para SEGA. Ahora bien, tal como se indica, algunos insiders habrían dejado constancia de que había una manifiesta falta de dirección, el cambio disruptivo del motor y el exceso de cautela con su diseño, contribuyeron a que el desarrollo no prosperase.
Esta información llegaría desde el propio estudio, donde miembros anónimos habrían declarado que existía una «falta total de dirección, muchos de los dirigentes dormidos al volante pero nunca parecen perder sus puestos de trabajo. Un cambio de motor, a mitad del proceso. Intentando entrar en un mercado saturado, y no comprometerme a hacer nada aventurero con el juego”. Son palabras duras de un estudio que estaba viendo que el proyecto no estaba yendo por el camino que debía.
El estudio buscaba tener un proyecto que tuviese un mayor grado de incidencia en consolas, y tomó como referencia juegos como Destiny, Escape from Tarkov y PUBG. Se buscó un perfil de juego PvE con soporte hasta 15 jugadores en equipos de tres usuarios. Se buscaba combinar ese aspecto cooperativo y competitivo, como ya han hecho otros juegos, donde los jugadores tenían que luchar por saquear mercancías y salir con el botín. La idea, mala no parece.
“En los primeros días, Hyenas buscaba una vibra de ‘pícaros adorables’, sobreviviendo en un mundo desordenado controlado por la élite, canalizando a Han Solo con un poco de Firefly por si acaso», dijo un desarrollador anónimo a Volound. “Parecía intrigante, pero los detalles eran vagos. La Tierra estaba en ruinas, los ricos lo tenían todo, robaban para sobrevivir, un escenario de ciencia ficción descarnado con un toque de la NASA”. Pero cuando comenzaron a desarrollarlo, las cosas empezaron a torcerse.
Gran parte del problema parece residir en el cambio de motor gráfico. Comenzaron con el motor de Alien: Isolation, pero se decidió a medio proceso de desarrollo dar el salto a Unreal Engine. Eso movilizó parte del estudio para que pudieran trabajar en algo al no poder contribuir. Y obviamente, esto provocó un desequilibrio notable, para lo cual, buscaron alguien que pudiera liderar el equipo. Otro cambio susceptible de generar confusión e inestabilidad, más cuando coincidió con su presentación global.
De primeras, este relevo en la dirección pareció funcionar, pero más allá de las primeras semanas y esa promoción global que se hizo, el caos empezó a apoderarse del desarrollo. Tiempo después SEGA planteó un ajuste en el modelo de negocio, asegurando que era un proyecto desafiante y exponiéndolo como un free-2-play. Esto siempre supone mucha insinuación de micropagos y otro tipo de método de ingresos que no suelen ser populares.
Las fuentes también confirmaron que, si bien Hyenas se planeó originalmente como un juego premium, cuando se canceló había pasado a un modelo gratuito con microtransacciones, aunque muy limitado después del lanzamiento. El soporte de lanzamiento en realidad había sido rediseñado. Puede que ahí ya se estuviesen viendo las orejas al lobo. Llegaron las primeras pruebas y el resultado que se obtuvo no fue satisfactorio para SEGA, la falta de interés, derivada de la falta de registros, hizo que tomase una decisión tan drástica como la conocemos.
Y que ahora se sepa que Hyenas era el proyecto más importante para SEGA antes de cancelarse, denota que este proyecto comenzó como una idea prometedora con un alto presupuesto que fue engordando con los cambios y los problemas que surgieron.
El desenlace lo conocemos, por desgracia, Hyenas fue cancelado y todo lo bonito que podía salir de esta propuesta caerá en saco roto. ¿Está saturado el mercado de los juegos multijugador? No son pocos los juegos que, pese a ver la luz, pasan sin pena ni gloria o son objeto de abandono pasado muy poco tiempo. ¿Esto impide confiar en este tipo de productos?