WRC 9: Después de su gran anuncio el pasado marzo, la saga WRC volverá por todo lo alto este próximo 3 de septiembre a PC, PlayStation 4 y por supuesto a nuestra Xbox One con su novena entrega, la cual sigue siendo desarrollada por el estudio francés Kylotonn y editada por Nacon, filial de Bigben Interactive. Pero vayamos a lo que realmente importa: ¿Qué es lo que nos espera en el título de 2020?
Pese a que WRC 8 nos dejó con buen sabor de boca el año pasado aún con algún que otro ‘pero’ que hacía que, técnicamente, la entrega quedase por debajo de otros juegos similares, el nuevo WRC 9 no solo pretende mejorar tales apartados, si no que también adaptarse a la demanda actual dando especial importancia y dedicación a la parte social del juego, marcando la diferencia con sus entregas anteriores. Sabiendo esto, más o menos ya sabe uno por donde van los tiros pero vayamos poco a poco:
Grandes novedades que equilibran la balanza.
No solo contamos con las 10 etapas exclusivas que ya contaba su antecesor, ahora podremos disfrutar de hasta 5 nuevos rallies como son los de Japón, Nueva Zelanda, Kenya, Finlandia y Portugal, siendo los dos últimos contenido post-lanzamiento. Una gran variedad de escenarios que aportan diversidad tanto visual como climatológica, así como sus respectivos efectos ligados a la conducción. Hay que decir que algunos circuitos como los de Nueva Zelanda son toda una delicia bajo la lluvia.
En cuanto a clubs y sus correspondientes equipos tenemos a nuestra disposición 52 nuevos llegados desde las categorías WRC, WRC 2, WRC 3 e incluso WRC Junior, todos ellos con sus correspondientes vehículos y además, añadiendo de forma única para la comunidad hasta 15 de los coches más famosos de la historia de la competición. Terminamos con dos de las innovaciones más destacadas como es la liga personalizable, donde los jugadores podrán crear su propia competición desde 0 con sus preferencias e invitar a otros a participar en esta, así como el modo copiloto, una opción cooperativa para competir junto a nuestros amigos desde el asiento del acompañante.
Por último, y no por ello menos importante, también se han implementado mejoras a nivel técnico y gráfico con la ayuda de DirectX 12 que si bien, mejoran en buena medida el apartado gráfico pero que, si lo comparamos con el 8, no resaltan grandes cambios a parte de la estética de los vehículos, algo de lo que puede cojear -por desgracia- siempre y cuando lo pongamos frente a sus sagas rivales. Aún así el juego cumple, ofreciéndonos grandes efectos en cada circuito haciendo especial hincapié en los detalles de cada ambiente.
En cuanto a jugabilidad esta nueva entrega sigue en sus trece. Se han realizado pequeñas modificaciones para que la experiencia de juego siga siendo la mejor posible. Es sencilla, adictiva -gracias a su cantidad de clases de carreras-, rápida y desafiante. Cuenta con diferentes opciones en cuanto a dificultad pero incluso la intermedia puede suponer todo un reto si no estamos acostumbrados al género, algo que viene de la mano de uno de sus puntos fuertes más destacables: su realismo.
No es que te pongas a jugar y de la nada arrases en cada circuito, para nada. Ser competidor de rally no es moco de pavo y tampoco lo iba a ser en su simulador: se necesita práctica, determinación y un poco de estrategia a la hora de escoger el automóvil y los neumáticos perfectos para cada camino junto al trabajo en equipo. El resto que completa dicha experiencia lo pone el propio juego, tanto con su estética y sus efectos, como en el apartado jugable. Aunque si esto nos sabe a poco siempre podemos activar la opción de daños reales del coche. Os prometo que llegar de una pieza y marcar un buen tiempo a su vez nunca fue tan difícil.
Viendo esto, el estudio deja claro ya que cuenta con un buen simulador de conducción y, aunque hay algunos aspectos que podrían mejorarse, se centra sobretodo en explotar el contenido nuevo y ofrecer la mejor jugabilidad, misión que cumple con creces estudiando las últimas novedades y tecnologías del propio deporte, aportándole gran fidelidad y riqueza al juego, así como horas y horas de entretenimiento con numerosas combinaciones. Si a esto le sumamos el modo Carrera, los objetivos, desafíos semanales y demás contenido comunitario, el título está a otro nivel, aunque falta por ver todas sus opciones sociales. Teniendo presente que es la sección a la que más tiempo y trabajo le han querido dedicar, sería muy precipitado llegar a una conclusión sin haber probado uno de sus aspectos más importantes. ¿Cambiarán estas funciones la saga WRC tal y como la conocemos? Y por otro lado, sus pequeñas contras desaparecerán con su llegada a nueva generación -aún sin fecha-? Tendremos que esperar para verlo.
Recordad que WRC 9 ya se puede reservar y con ello, de forma gratuita recibiremos el legendario Audi Quattro A2 de 1984, mientras que su edición digital deluxe nos ofrecerá gran cantidad de incentivos como acceso anticipado, pase gratuito de tres meses y muchos otros contenidos adicionales anunciados y por anunciar.