En las pasadas Navidades de 2016 el videojuego Overwatch, a través de su cómic, reveló que el personaje Tracer además de ser la imagen principal y más reconocible del título, era homosexual. Las reacciones no se hicieron esperar y hubo de todo tipo, unos decían que era un movimiento para dar publicidad al juego y que no parecía haber detrás un interés sincero con la comunidad LGBT. En Rusia, donde las leyes contra la propaganda homosexual son muy estrictas, los colectivos aplaudían esta noticia por la representación homosexual en un videojuego tan popular y otros lo veían como una aberración.Sus motivos no son realmente importantes, lo que sí es relevante es que esta reacción sigue teniendo eco a día de hoy.
Y no habría polémica si no fuera porque desgraciadamente, el colectivo LGBT no tiene una aceptación total en nuestra sociedad. Los videojuegos son solo uno de los ámbitos donde este colectivo lucha por hacerse ver y oír. Hoy desde SomosXbox, queremos mostrar nuestro apoyo abiertamente a todas las personas que luchan día a día porque la identidad sexual y la orientación sexual no sea una etiqueta con la que agrupar a las personas y con ello hacerlas sentir diferentes, todos somos personas que pueden, o no, querer a otras personas.
De modo que os traemos un artículo en el que hemos puesto todo nuestro cariño, para tratar de explicar la evolución de la comunidad LGBT en los videojuegos. Antes de que nadie se nos eche al cuello, aclaro, que usaremos las siglas LGBT para referirnos a todo el conjunto de personas que agrupan las siglas LGBTIQ+, que hace referencia al colectivo lésbico, gay, bisexual, transexual, intersexual, queer, incluyendo a través del «+» cualquier otra identidad que se quede en el medio o fuera de ellas. Es decir… hasta las siglas LGBT, están anticuadas, puesto que no todas las personas pueden sentirse representadas por esa denominación, de modo que para abreviar me dirigiré a todas las personas no heterosexuales, LGBT. Ahora sí:
El movimiento LGBT
Todos los 28 de junio se celebra mundialmente el día del orgullo gay. Las calles de muchas ciudades de todo el planeta se tiñen de colores y las distintas comunidades se unen para reivindicar tolerancia. Para conocer los orígenes de esta celebración, tenemos que remontarnos a la década de los años 60 en Estados Unidos. Este período albergó diferentes revoluciones sociales como el movimiento afroamericano por los derechos civiles o las manifestaciones contra la guerra. Las redadas policiales en bares y locales frecuentados por homosexuales, transexuales y drag queen, por parte del gobierno, estaban a la orden del día, dado que por aquel entonces estas comunidades no estaban aceptadas.
De hecho, en EEUU, las relaciones íntimas entre homosexuales se castigaban con penas de entre 5 a 20 años en prisión o con procesos médicos como la castración o el ingreso en centros psiquiátricos. El 28 de junio, unidades de policía se presentaron en un pub del barrio de Green Village, en Nueva York, donde la comunidad LGBT, que tenía limitado el acceso a varios tipos de locales, podía estar libremente. Tal día, la policía comenzó a pedir las identificaciones de todos los que allí se encontraban, pero algo cambió, ya que algunos de los presentes se negaron.
Poco a poco, la gente del barrio se concentró alrededor del pub y comenzaron a rebelarse contra la policía. Estos altercados dieron lugar a una serie de manifestaciones en las que se reivindicaba que estas comunidades pudieran ir a diferentes locales sin ser arrestados por su orientación sexual. Ahora, dicho pub, es un monumento nacional en Estados Unidos. Estos hechos fueron los desencadenantes de una serie de manifestaciones por todo el país. El 28 de junio de 1970, tenían lugar las primeras marchas del orgullo gay en Nueva York y Los Ángeles.
Esta fecha se ha globalizado y, a pesar de que los derechos se han ampliado, las manifestaciones siguen buscando la no discriminación de los distintos colectivos y la despenalización en los países que todavía condenan a las personas por su orientación sexual. Este año, el orgullo celebra el 50 aniversario de esta señalada fecha.
Los personajes LGBT dentro de los videojuegos
La representación LGBT en los videojuegos no es un asunto insignificante y un buen punto de partida para tratar dicho tema, es empezando por la comunidad de videojugadores y su relación con ella. Han sido varias veces las que estas dos comunidades han entrado en confrontación, desde situaciones como lo anteriormente comentado con Tracer, o como hasta hace unos años, donde una revista de temática LGBT hizo un listado de los videojuegos más gays de la historia, en el que incluía por ejemplo, a Duke Nukem argumentando que su vocabulario y su gusto por las mujeres son sólo una tapadera de los deseos reprimidos de una reinona. O en Contra, donde hacía un paralelismo con Brokeback Mountain, ya que trataba de dos tipos en camisetas que se necesitan mutuamente para seguir avanzando. Varios sitios web hicieron eco de este artículo y los comentarios de gente ofendida no se hicieron esperar.
Si bien, esto parecía tener más bien un matiz humorístico e hizo que la gente pusiera el grito en el cielo, veamos el desarrollo de la comunidad LGBT en los videojuegos. El primer videojuego con un personaje homosexual es Moonmist (1986), pero no sería hasta 9 años más tarde con el juego Orion Conspirancy, que la palabra homosexual para referirse a su protagonista, se dijo claramente. Quizás usar la cultura japonesa para dar ejemplos de sexualidad sea algo controvertido, pero si hay que reconocerles algo a los japoneses, es su aceptación por el trasvestismo.
En 1988, con el juego Super Mario 2, apareció el personaje de «Birdo», un personaje masculino al cual le gustaba vestirse de mujer. Mientras que este personaje permaneció intacto para el público nipón, en Europa y América, Birdo pasó a ser Birdetta. Cambiaron totalmente de sexo a este personaje, en vez de hacer de él algo natural. Continuando con personajes transexuales, en el título de peleas, Final Fight, los personajes de Poison y Roxy son hombres que se sienten mujer.
Esto se reveló cuando los desarrolladores del juego tuvieron que justificar para el mercado americano que no había hombres pegando a mujeres. Todos estamos de acuerdo con que la violencia de género está mal y daría para otro artículo como este… pero, seamos sinceros, estamos hablando de un título de peleas, no de un juego que promueva pegar a mujeres. Aún así, se optó por la opción de decir que ellas no eran mujeres, con lo que solventaron el escollo y pusieron una piedra más para el avance de la comunidad LGBT.
El primer videojuego en permitir matrimonios entre personajes del mismo sexo fue Fallout 2 en 1998. Dos años más tarde, con la llegada del videojuego Sims, llevarían este tipo de enlaces como algo natural e inherente a su saga. No obstante, en los Sims, no hay una bisexualidad real, puesto que los emparejamientos se deben más a como reaccionemos ante ciertos estímulos de otro personaje, que a ser algo que defina realmente cómo es un personaje.
Sin llegar a etiquetar a los avatares como «el bisexual», «la lesbiana» o «el hetero», los personajes carecen de diversidad, ya que todos son bisexuales y se inclinarán por un sexo u otro, dependiendo de las respuestas que reciban. Aun así, gracias a Electronic Arts, ver a hombres o mujeres manteniendo relaciones con personas de su mismo sexo, ha alcanzado un gran nivel de normalidad, donde las presentaciones de expansiones o juegos nuevos de la saga no suscitan la polémica con estos temas.
Bioware recibe muchas críticas por sus personajes LGBT
Pero si hay que destacar una compañía en términos de desarrollo de la comunidad LGBT en los videojuegos, tenemos que hablar de BioWare. Si bien, no ha estado exenta de críticas por introducir personajes del colectivo LGBT, ha sabido sobreponerse y llevarlo a sus juegos. Las dos sagas principales de esta compañía, Mass Effect y Dragon Age, siempre se han caracterizado por tener un apartado narrativo y técnico más que notable, pero ellos fueron los primeros en introducir personajes con interés en personas de su mismo sexo (sin contar la especie), dándoles un peso argumentativo válido.
En ambos casos, nuestro/a protagonista no podrá mantener una relación con quien quiera independientemente de su género, dado que algunos personajes serán afines y otros no. Su sexualidad no es el rasgo más distintivo de su personalidad, por poner un ejemplo, en Dragon Age Inquisition, tenemos a Dorian, un mago, el cuál aparta los típicos clichés del hombre homosexual. Su desarrollo de personaje es elaborado, ser gay no define su personalidad, lo hacen el conjunto de experiencias que ha vivido durante su vida, pero si eres una mujer, su interés será puramente amistoso contigo.
O por poner otro ejemplo, la Doctora Liara T´soni, podía mantener una relación independientemente del personaje con que jugáramos, pues en su cultura como «asari», solo había mujeres y se promovían las relaciones entre especies independientemente del género.
El desarrollo de la comunidad LGBT en los videojuegos, desde luego es real pero, por desgracia, aun debemos hablar de desarrollo y no de una integración total. El videojuego Cyberpunk 2077, que no llega hasta el año que viene, ya ha desatado polémica, con el personaje que aparece en un cartel dentro del propio juego acusándole de ser transfóbico.
Un gran público pide un trabajo más activo por parte de las desarrolladoras para incluir a la comunidad LGBT dentro de los videojuegos, pero también hay otro sector más perezoso para los cambios, que puede ver herida su sensibilidad. De modo que, los equipos de desarrollo trabajan con cuidado para que esto pueda llevarse a cabo de la manera más práctica posible y que cada paso adelante no pueda ser retrocedido.
Microsoft tiene un historial de inclusión LGBT
Dentro de la comunidad de jugadores, lo que más directamente nos atañe a nosotros y nosotras (por ser lectores de esta Web), es la postura de Xbox y Microsoft al respecto y, sinceramente, es de aplaudir su desempeño. Habréis visto pequeños detalles como el cambio de su logo durante todo el mes de junio, con el fondo de la bandera arco iris, tanto en su cuenta oficial de Twitter, como en todas su sedes. Pero no solo eso, la implicación de Microsoft con el colectivo LGBT es absoluta, aquí tenéis una entrada a su blog donde encontraréis un anuncio público y declaración de intenciones de la compañía. No obstante, os dejo aquí su introducción:
Para nosotros, el Orgullo es una oportunidad para reflexionar sobre nuestro pasado y dinamizar la acción. Comenzamos nuestro viaje de inclusión temprano en la historia de la compañía, introduciendo la orientación sexual en nuestras políticas de no discriminación en 1989. En 1993, fuimos una de las primeras compañías en el mundo en ofrecer beneficios a los empleados con parejas del mismo sexo. En 2004, agregamos la identidad de género a nuestra declaración de Igualdad de Oportunidades en el Empleo y comenzamos a proporcionar servicios de salud que afirman el género. Desde 2005, Microsoft ha alcanzado una puntuación máxima de 100 en el Índice de Igualdad Corporativa de la Campaña de Derechos Humanos, lo que indica que Microsoft está estableciendo y aplicando políticas para proteger a la comunidad LGBTQI +.
Jugad con orgullo
Hace no tanto tiempo, la comunidad de jugadores también era señalada con el dedo y era objeto de burlas por el público general, usando el apelativo «Friki» como algo despectivo. Con el paso del tiempo, las miras de la gente se agrandaron y «Friki» resultó ser más un adjetivo divertido que uno despectivo. De hecho, el sector friki más pasional por el mundo de los videojuegos recibe el nombre de «gamer», pero lo llevan con orgullo. Y hablando de orgullo, hasta los frikis tienen su día del orgullo el día 25 de mayo.
Creo que la comunidad de jugadores ha evolucionado mucho, hasta el punto de verse totalmente integrada en la sociedad actual. ¡Hasta querían incluir los videojuegos en las olimpiadas! En resumen, hemos sido precursores de un movimiento que socialmente estaba mal visto y hemos salido adelante evolucionando y progresando. No obstante, los videojuegos no tienen tanta historia como lo pueden tener, la homosexualidad, la bisexualidad o la transexualidad, por lo que hacer desaparecer cientos de años de prejuicios no es tan sencillo como haya podido ser en nuestro caso. Todos nosotros como personas, indiferentemente del género, color de piel, preferencia sexual o gustos personales, debemos ser tolerantes y respetuosos con los demás. Nuestra libertad acaba cuando empieza la de los demás.
El mundo evoluciona, podemos hacerlo con él o quedarnos atrás. Cuando pasen los años e intentemos reconocer nuestra posición en la sociedad, habrá que valorar si vamos acorde a una mentalidad contemporánea o nos hemos estancado en el pasado.
Respetaros, apoyaros y jugad con orgullo.