Microsoft ha perdido la guerra de consolas, al menos ese es el argumento que tiene en mente usar la empresa para ganarse el favor de la FTC. Microsoft argumenta que Xbox ha «perdido la guerra de las consolas», demostrando que ha quedado en muchos mercados en tercer lugar por detrás de la competencia, en este caso Sony y Nintendo. Además la compañía revela que Xbox tuvo una participación del 16 por ciento en las ventas de consolas en 2021.
Estos datos han sido compartidos por Tom Warren y el medio The Verge. De cumplirse esto, estaríamos ante uno de los últimos recursos de Microsoft para hacer frente a la FTC y tratar de conseguir una decisión final favorable ante la situación que ha estado viviendo la compañía estos últimos meses.
Fuente: Tom Warren en Twitter
Fuente: Tom Warren en Twitter
Microsoft ha perdido la guerra de consolas, este es el argumento que ha esgrimido la empresa ante la situación de la FTC
En el documento, Microsoft ha afirmado que desde que llegó al mercado de videojuegos, siempre se ha visto superada por sus competidores en la venta de consolas. Durante los últimos veinte años esta competencia ha tenido como máximos exponentes a Nintendo, Sony y Xbox, enfrentados en la conocida por todos «guerra de consolas». Un término que se acuñó popularmente para definir la situación de competencia entre las tres empresas.
«Sony es la compañía dominante en la venta de consolas. Durante más de dos décadas y cinco generaciones, PlayStation ha sido la consola dominante tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo.»

Xbox argumenta que durante años se han mantenido por detrás de sus competidores. Para demostrarlo, Microsoft ha querido ser más concreta, argumentando que en 2021 Xbox tenía el 16% del mercado, unas cifras que distan mucho de las de la competencia. También han especificado que Xbox tenía el 21 % de beneficios por el mercado de consolas.
Con estos datos Microsoft ha jugado uno de sus últimos ases ante la FTC para ser capaces de sortear la complicada situación que ha estado acosando a la compañía durante meses y que ha imposibilitado cerrar acuerdos como la compra de Activision Blizzard.