Hace un par de meses un estudio desvelaba que Netflix había perdido casi dos millones de suscriptores en España tras el fin de la compartición de cuentas, pero eso no significa que a la compañía norteamericana no le haya salido rentable la jugada. De hecho, otra de las grandes medidas recientes de Netflix ha sido el plan básico con anuncios, que también parece haber arrojado buenos resultados a tenor de lo que hoy tenemos que contarte.
En ese sentido, ahora hemos sabido que Netflix planea eliminar progresivamente su plan básico sin anuncios. Así lo ha dado a conocer la propia compañía de streaming a través de su reunión trimestral financiera para accionistas (vía IGN), algo que no es precisamente nuevo en algunos territorios y que parece que se irá extendiendo a otros países poco a poco.
Netflix planea eliminar progresivamente su plan básico sin anuncios
Según la mencionada fuente, el pasado verano el plan básico sin anuncios ya desapareció en Reino Unido y solo volvió a aparecer tiempo después para aquellos usuarios que lo hubieran contratado alguna vez en el pasado. Ahora la medida ya es firme. A partir de la próxima primavera este plan de suscripción dejará de estar disponible en Reino Unido y Canadá, con la más que clara intención de que otros países se incorporen a la lista una vez se compruebe la eficacia de la idea.
La idea tras el movimiento está clara: que los nuevos usuarios se suscriban al plan básico con anuncios (que seguramente reporte a Netflix más ingresos que el libre de publicidad) o, por el contrario, se vean obligados a contratar el plan estándar, que te obliga a gastar algo más de dinero cada mes. Aunque no lo sea de forma directa, la medida puede considerarse como una subida de precio del servicio. Y es que si no quieres tener publicidad en tus contenidos debes pagar más de lo que se pagaba anteriormente como mínimo.

Por el momento no hay noticias de cuándo llegará (si llega) la eliminación del plan básico sin anuncios a España, pero es más que posible que lo haga teniendo en cuenta que nuestro país ya fue uno de los conejillos de Indias a la hora de poner a prueba el fin de la compartición de cuentas.