La ausencia de Black Myth Wukong en Xbox ha causado un gran revuelo entre los jugadores, especialmente después de que el desarrollador Games Science sugiriera que la decisión se debía a las limitaciones técnicas de Xbox Series S. Sin embargo, un representante de Microsoft ha salido al paso para desmentir estas afirmaciones y poner el foco en otro culpable: Sony.
Según declaraciones recientes recogidas por un representante de la compañía en Forbes, la decisión de no llevar Black Myth Wukong a Xbox no tiene nada que ver con las capacidades técnicas de la plataforma. En su lugar, señala que la razón podría ser la exclusividad temporal para PS5 que tanto se ha comentado en los últimos días, y que correspondería a un acuerdo firmado entre Games Science y Sony, que bloquearía el lanzamiento del juego en otras consolas, al menos por un tiempo.
Xbox Series X|S es capaz de ejecutar Black Myth Wukong de sobra, según un representante de la compañía
Este tipo de acuerdos de exclusividad no son nuevos en la industria, pero la situación de Black Myth Wukong ha reavivado el debate sobre la práctica. Especialmente porque desde el propio estudio desarrollador han asegurado que no existía ningún tipo de acuerdo con otras compañías, y que la única razón de que el juego no llegara a consolas Xbox se debía a un problema con la memoria de Xbox Series S. Sin embargo, el representante de Microsoft ha descartado esta versión.
«Como hemos dicho antes, estamos emocionados por el lanzamiento de Black Myth Wukong en Xbox Series X|S y estamos trabajando con Game Science para llevar el juego a nuestras plataformas. Preferiríamos no comentar sobre los acuerdos hechos por nuestros socios con otros titulares de plataformas, pero podemos confirmar que el retraso no se debe a las limitaciones de la plataforma Xbox que se nos han planteado».
El representante de Microsoft no dudó en señalar que la Xbox Series X|S es más que capaz de manejar las exigencias técnicas de Black Myth Wukong, y que las afirmaciones de Games Science sobre las «limitaciones» de la plataforma son infundadas. Además, subrayó que los jugadores de Xbox no deberían preocuparse por la potencia de su consola, sino más bien por las estrategias comerciales que a veces privan a los usuarios de ciertos títulos.
La respuesta de Microsoft deja claro que, al menos desde su perspectiva, la situación se trata más de una jugada estratégica por parte de Sony para asegurar exclusividades en su consola, que de un problema técnico con la Xbox. Esto también refuerza la competencia entre las dos gigantes del gaming, que continúan buscando maneras de diferenciarse y atraer a los jugadores a sus respectivos ecosistemas.