Phil Spencer sale a escena para arrojar un poco más de luz sobre cómo han planteado la nueva generación de consolas junto a AMD. Para ello, recuerda los logros conseguidos con Xbox One X, siendo una de las consolas mejor afinadas para conseguir un rendimiento extraordinario a 4K. Pero no por ello dejan de haber problemas que han limitado la capacidad real que hubiera tenido Xbox One X. Y se centra en el cuello de botella que suponen las CPU empleadas en la actual generación. Phil Spencer habla sobre la capacidad de la CPU de Xbox Series X, gracias a la aportación de los Zen 2 de AMD.
Ya con Xbox One X, Microsoft demostró un buen entendimiento con AMD para crear una consola potenciada a nuevos niveles en esta generación, siendo la consolas más potente del mercado. Quieren repetir ese escenario con Xbox Series X, pero para ello han decidido centrarse en compensar ese cuello de botella que ha limitado a Xbox Series X, la CPU. Los nuevos procesadores basados en Zen 2 de AMD han demostrado en PC ser muy capaces de obtener un rendimiento importante, superior a sus rivales. Esa tecnología será la que permita que Xbox Series X no repita ese cuello de botella con la CPU. Ya vimos, hace unos días, la diferencia entre las nuevas CPU de AMD con las que portan Xbox One y Playstation 4.
Microsoft no quiere repetir con Xbox Series X los errores del pasado
Según comenta Phil Spencer, las actuales consolas han estado limitadas por un procesador de bajo consumo y bajo rendimiento. El chip Jaguar que montan tanto Playstation 4 como Xbox One, tienen un rendimiento bajo que ha impedido alcanzar tasas elevadas de frames por segundo. Spencer ya mostró su interés por los framerates elevados, más que por la resolución incluso. Dado que los procesadores Jaguar tienen este límite, la generación actual ha tenido complicado superar esos 30fps que les ha definido. Spencer es consciente que tanto Xbox Series X, como Playstation 5, van a poner fin a este «drama».
El salto a Zen 2 va a permitir a los desarrolladores a disponer de mucha más potencia en bruto y conseguirán una mejoría notable en todos los ámbitos. Spencer desea que eso se pueda ver reflejado en juegos que «se vean increíbles», pero son muchos los factores que hacen pensar que, además, también «se sentirán increíbles». Incluso, la teoría de una Xbox Series S con un Zen 2 puede cobrar fuerza, aunque sobre el papel no tenga tantos TFlops que la Xbox One X. El equilibrio, la potencia de la CPU, marcaría una diferencia en cuestiones de experiencia de juego y framerate, si bien no se plantea este segundo modelo para los 4K.
Una prueba de rendimiento de una nueva APU de AMD ha sido relacionada con Xbox Series S
Xbox Series S, Xbox Series X, ahora mismo son especulaciones, filtraciones y deseos de tener una generación potente y capaz de ofrecer la mejor experiencia de juego posible. Pero de ella no se sabrá hasta un futuro que se antoja lejano por las ganas que hay de conocer nuevos detalles de lo que nos espera a finales de 2020.