El tiempo vuela cuando nos divertimos. Aquel dicho tan popular parece siempre ser cierto, ya que los dos últimos años se han pasado más que rápido, considerando todo lo que se ha presentado desde aquel entonces, en donde en un expectante 2020, se lanzaba la nueva generación de consolas, Xbox Series X|S. Estos dos últimos años, hemos tenido una gran cantidad de noticias y situaciones que, lamentablemente por la pandemia del COVID, han desencadenado tener que esperar grandes periodos de tiempo para conseguir una de estas consolas, y vaya que se sintió. Sin embargo, el tiempo ha pasado y el stock ha mejorado, pudiendo hoy en día obtener una sin problemas.
Todo esto ha llevado a las compañías y algunos analistas de la industria, a plantearse y deducir las consolas de mitad de generación, es decir, las revisiones de las actuales consolas, las cuales no solo vendrían con nuevos diseños más “delgados”, sino que también con más potencia y funciones. Lo anterior podría sonar lógico y hasta aceptable, pero lo cierto es que el mercado, los jugadores y la economía no está lista aún para nuevas consolas Xbox, y te contaré mi percepción del por qué. Te invito a que leas este articulo y compartamos un par de ideas sobre ello.
Debemos exprimir lo que ya tenemos
Las consolas de actual generación salieron hace poco más de 2 años, teniendo una muy corta vida hasta el momento, sobre todo viviendo con una pandemia y considerando que la mayoría de juegos han sido intergeneracionales. El hardware de las consolas es realmente muy avanzado hasta el día de hoy, pudiendo correr la mayoría de juegos sin ningún problema y con una potencia descomunal. Lo anterior, se hace aún más evidente con los juegos que tenemos en la actualidad, los cuales en su gran mayoría son desarrollados para ambas generaciones, desaprovechando toda la potencia de las nuevas máquinas.
¿Realmente es necesario lanzar una revisión cuando aún no se aprovechan al 100% las actuales? Existen muchos desarrolladores y estudios creando recién juegos para las actuales consolas, los cuales no llegarán hasta dentro de 2 o 3 años, cuando el desarrollo esté en óptimas condiciones. Si consideramos tener una revisión pronto, esto será perjudicial para los desarrolladores, ya que además de estar desarrollando para las actuales consolas, deberán tener en cuenta el hardware más actualizado, pudiendo resultar en un retraso evidente.
Asimismo, los jugadores podrían verse seriamente afectados, ya que los juegos obviamente correrán mejor en las nuevas consolas (gracias a la optimización de los desarrolladores), dejando de lado las actuales entregando un producto mucho menos pulido. Con esto no estoy diciendo que no deba existir nunca una revisión, ya que a mitad de generación se sentirá necesario por su puesto, sobre todo tomando las palabras de Xbox de que la próxima generación no llegará hasta el 2028. No obstante, creo que en 2023 o incluso 2024 es demasiado pronto, innecesario y perjudicial para todos, dado que aún hay jugadores que no obtienen su consola de nueva generación. Primero debemos obtener juegos 100% optimizados para las nuevas consolas, y cuando estos queden al límite sin poder entregar más, pensar en una revisión para aumentar la potencia y las capacidades.
¿Por qué no necesitamos aún una nueva Xbox?
Siguiendo la línea de los efectos que podría tener esto, uno de los que se asoma fuertemente es la pérdida de interés de los jugadores, potenciado por la difícil economía, resultando en bajas ventas o estancamiento de las mismas. Xbox ha gozado de excelentes ventas con sus consolas, algo totalmente increíble viendo la historia que tuvo la Xbox One por ejemplo. No obstante, esta generación Xbox ha demostrado que está en favor de los jugadores, gracias a su poderoso hardware y accesibles servicios, como Game Pass. Si apareciera una revisión… ¿Crees que los jugadores actualizarían su sistema o comprarían esa por mucho más dinero? La respuesta es claramente no.
Las nuevas consolas se han caracterizado, dentro de muchas cosas, por no ser precisamente económicas, dificultando el acceso a una gran cantidad de jugadores. Claramente el hardware y los altos componentes tecnológicos incrementan su valor, de eso no hay duda, pero viendo el panorama general, no muchos jugadores pueden acceder a consolas con tanto valor, desistiendo de esto muchas veces hasta esperar una buena oferta con el paso del tiempo. Analizando este panorama, si existiera una revisión (un poco más cara por su nuevo hardware), los jugadores difícilmente optarían por este modelo, dejando esperar aún más la compra.
Esto tendría serias consecuencias para las ventas de Xbox, ya que no seguirían al alza como están actualmente, todo lo contrario, se estancarían por el hecho de aumentar el valor. El único movimiento que podría hacer Xbox para no dejar que ocurra lo anterior, sería bajar aún más de precio las Xbox Series X|S para dar paso a las revisiones, pero nada asegura que sigan con las buenas ventas, sobre todo porque el hardware más potente tendrá la mejor experiencia.
No me subestimen, no estoy en contra de las revisiones, todo lo contrario, creo que son necesarias para la mitad de la generación, pero considerando todo lo que ha pasado en estos años (que no fueron precisamente normales), creo que es demasiado pronto para una revisión. Aún debemos aprovechar mucho el potencial que nos tienen para entregar las actuales consolas, sobre todo con juegos next-gen que aún no llegan, que saquen el máximo provecho a las consolas, pudiendo sentir de verdad la nueva generación. Cuando esto ocurra, cuando sintamos que nuestras consolas ya no dan más con los juegos que están en el mercado, recién ahí podremos pensar en una revisión, pero no antes, no cuando el potencial de las actuales apenas ve la luz.