Desde que fue presentada Xbox Series X, pocos han dejado de opinar sobre lo que puede deparar la próxima generación. El hardware más potente que capitanea este salto generacional, abarca algo más que esos 12TF de la GPU. Se ha hablado de la capacidad de procesamiento del procesador Zen 2 de AMD, se ha hablado del SSD, de la memoria, del ancho de banda y de las virtudes del RDNA 2.0 de muchas maneras diferentes. Pero ahora que parece que una nueva presentación se avecina ¿Qué opinan las desarrolladoras sobre Xbox Series X?
Windows Central ha querido contactar con algunos de los máximos responsables de los principales estudios que estarían desarrollando algún juego que recalará en Xbox Series X. Y de este modo, ha creado una visión global que recoge esos factores que tantas veces han sido protagonistas de tantas impresiones que, incluso, se han llegado a contradecir. Al final, con las herramientas de desarrollo que ha expuesto Microsoft y con algo más de tiempo para poder indagar sobre el potencial del hardware, la postura mayoritaria es de elogio a Xbox Series X.
Microsoft registra el logo de Xbox Series X
Jason Ronald, Director de gestión de programas para Xbox, es una de las caras más visibles de este desarrollo. Lo hemos visto en algunos directos y entrevistas de Microsoft que se han centrado en el hardware. En cierto modo, es el planteamiento de la propia compañía para avalar un hardware que busca revolucionar el panorama de los videojuegos. Según Roland, «necesitábamos revolucionar la arquitectura tradicional de la consola para ofrecer un rendimiento constante, fiable y sostenido nunca visto jamás». Achaca a que en las generaciones pasadas se ha visto un incremento notable en la revolución gráfica, pero «cada vez se han visto más limitados por las limitaciones técnicas». Por ello, con Xbox Series X «alcanzamos límites superiores de rendimiento» apuntando a elementos como la transferencia de información, vía SSD, memoria de alta velocidad y el RDNA. Combinado con el API DirectStorage, dando acceso al controlador NVME, se actúa como una solución Sampler Feedback Streaming que actúa como un multiplicador. Una tecnología que se presentó como Xbox Velocity.
Esto debe traducirse en más y mejores opciones de desarrollo, por lo que es importante extraer esta información en forma de experiencia. Y ahí, el medio ha contactado con otros miembros responsables de estudios que han avalado estas virtudes de Xbox Series X de una forma práctica, es decir, en el desarrollo de juegos. Joel Baker, de Hinterland Games, responables de juegos como The Long Dark, apunta a estas virtudes que depara el SSD. «Lo más emocionante para mi es la adición del SSD y el hardware personalizado que permite que los datos se transmitan más rápido», comenta el director técnico, asegurando que esto «permite mejores tiempos de carga y además, trabajar con conjuntos de datos más grandes sin tener que recurrir para todo a la memoria». Y a esto, añade la novedad del trazado de rayos, o Ray Tracing, que también resulta ser una tecnología que define como «emocionante». Su aplicación a determinados juegos permitirá ahondar en experiencias más inmersivas y profundas, y recordemos que esto no solo afecta al ámbito gráfico, también lo hará en el audio.
Los juegos de Xbox Series X requieren el uso del disco duro interno o de las tarjetas de expansión
Desde Moon Studios, reconocidos por los juegos de Ori, el director de tecnología Gennadiy Korol, ha elogiado Xbox Series X porque no solo permite llevar los juegos a una resolución más alta, sino porque es capaz de llevar los juegos a nuevos niveles de rendimiento. Los frames por segundo, una medida que sirve para evaluar el rendimiento general de un juego, ya no tendrá los 60fps como un objetivo inalcanzable. «Ori and the Will of the Wisps en alta resolución y a 120Hz, ya sabéis a qué me refiero», comenta como referencia Korol, siendo algo que se puede alcanzar «sin un PC de miles de dólares». Llevar esto a las consolas es algo que define como «muy emocionante», y supone «el verdadero salto de próxima generación que todos hemos estado esperando».
Kevin Floyer-Lea, de Rebellion, ha querido hablar del salto técnico general. Según comenta «Xbox Series X es un impulso genuino y significativo en el rendimiento con respecto a Xbox One». Tomando como referencia las opciones que añadió a la generación Xbox One X, poder elegir entre calidad, resolución y rendimiento son aspectos que elogia. La capacidad de procesamiento de la CPU, el uso de Ray Tracing, la velocidad de transferencia, las capacidades que se exponen con estas características, permitirán ampliar los objetivos y ofrecer «experiencias novedosas», donde «nos permite llevar a los jugadores a entornos más realistas y dinámicos».
Xbox Series X será la única consola de nueva generación que soporte Ray Tracing en tiempo real
Alexandre Sabourin, que estuvo implicado en Deus Ex: Mankind Divided y que ahora se encuentra enrolado en Snowed in Studios, se centra en las virtudes que supone el Ray Tracing. Es una tecnología que hasta ahora ha sido exclusiva de PC y de muy pocos desarrollos. La confirmación de las consolas abre la puerta a una tecnología que parece estar preparada para dar un salto cualitativo importante. La iluminación dinámica permite un diseño general «más realista y flexible», siendo una tecnología que no llega de nuevo. «Reflejos, sombras más definidas y suaves, refracción, transparencias», son elementos que se pueden depurar y que gracias al hardware de Xbox Series X, se pueden gestionar pese a su carga de proceso. Se puede observar que el hardware de Xbox Series X va conformándose en cada uno de sus aspectos, que son importantes, y que suponen un equilibrio que parece sobrepasar todos los límites que habían definido generaciones anteriores.
Finalizamos este recopilatorio de impresiones con The Coalition, responsables de Gears 5 y uno de los estudios que ha ganado enteros tras ver el resultado técnico y de rendimiento de este juego. Mike Rayner, Director Técnico del estudio, habla sobre el salto generacional aplicado a CPU y GPU. Parecen los elementos más importantes de un hardware que está mostrándose potente en muchos más aspectos. «Xbox Series X más que cumple con estas expectativas», define Rayner, a lo que añade que «una de las mejoras más emocionantes que supera con creces las expectativas son las mejoras masivas de I/O en Xbox Series X». Esto hace referencia a la velocidad general de los procesos y la cantidad de información que es capaz de gestionar, afectando directamente a la experiencia de juego. «Con Xbox Series X, fuera de la puerta, redujimos nuestros tiempos de carga en más de 4 veces sin ningún cambio de código. Con las nuevas API de DirectStorage», siendo capaces de aplicar muchas mejoras generales al combinar la velocidad con las capacidades de procesamiento sin tener que recurrir a protocolos clásicos que abusaban de elementos como la CPU o la memoria.
Muestran los primeros gameplays con Ray Tracing de Xbox Series X
En definitiva, resulta complicado quedarse con algún componente en concreto. La nueva generación no la define la CPU, no la definen los 12TF, no lo define el SSD, no lo define la memoria o el ancho de banda. El conjunto es lo que hace que Xbox Series X parezca un hardware que sorprende por sus especificaciones, que enamora por sus capacidades para desarrollar y que nos maravillará cuando vea la luz a finales del actual 2020. Antes de eso, toca atender a los eventos digitales que servirán de escaparate para que todo esto que dicen, sea contrastado en gameplays. Para eso no habrá que esperar tanto, pues podríamos tener ese contacto el mes de mayo.