La realidad virtual ha llegado para quedarse, y el ecosistema Xbox no va a ser una excepción. Ya sabemos que Microsoft tiene planes para lanzar dispositivos de realidad virtual en Windows 10, que la posibilidad de hacer streaming de la Xbox One a Oculus Rift está en camino e incluso empiezan a sonar los primeros juegos VR para Project Scorpio. No obstante, para disfrutar de todas estas opciones aún tendremos que esperar un tiempo. ¿Quieres disfrutar de la realidad virtual en Xbox One hoy mismo? En SomosXbox hemos encontrado una manera, y ya estamos disfrutando de juegos como Titanfall 2 o Halo 5 en VR.
Un smartphone es todo lo que necesitas
Existen muchas alternativas de realidad virtual, e infinidad de dispositivos que lo soportan. Un buen ejemplo son los smartphones con Android, que gracias a la tecnología Cardboard desarrollada por Google pueden convertirse en unas gafas de realidad virtual de bajo coste.Pues bien, esto es lo que vamos a utilizar para nuestras gafas de realidad virtual con las que jugar a la Xbox One. ¿Qué necesitamos? Pues una montura para las gafas, valen desde las clásicas Cardboard que pueden comprarse por poco más de 1€ hasta dispositivos más premium como las gafas VR de Xiaomi (unos 70€).
Evidentemente la calidad final dependerá tanto del smartphone – se recomienda una pantalla FullHD o superior, siendo ideal un móvil con pantalla 2K – como de la de las gafas de realidad virtual, pero siempre podremos hacernos una configuración a la medida de nuestro bolsillo y nuestro gusto. Nosotros vamos a utilizar unas OnePlus Loop VR, un dispositivo que podríamos clasificar como de «gama media».
Una vez tengamos todo, debemos descargar la aplicación Trinus VR Lite, que nos permite utilizar el teléfono como unas gafas de realidad virtual que reciben vídeo en streaming de nuestro ordenador con Windows 10. Configurar el ordenador será nuestro siguiente paso.
El streaming entre Xbox One y Windows 10
Para disfrutar de la realidad virtual en Xbox One, aprovecharemos el streaming de Windows 10 para trasmitir la imagen a las gafas, y para ello tendremos que descargar la aplicación Trinus VR también en el PC. Una vez instalada, tendremos que configurarla de acuerdo a las especificaciones de nuestras gafas de realidad virtual
pantalla de configuración de TrinusVR
Si pulsamos en el botón de configuración, veremos una serie de opciones disponibles, donde las más improtantes son la sensibilidad del giroscopio (en nuestro caso la mejor experiencia ocurrió al aumentarla al máximo), el tipo de lente (Cardboard) y el tamaño de la pantalla. Nosotros estamos usando un Xiaomi Mi Note, que es un dispositivo de 5,5′. El resto de opciones, en principio, no es necesario tocarlas para tener una experiencia óptima durante el juego.
Hecho esto, solo nos quedará iniciar el botón de retransmisión (el triángulo grande de la izquierda) y hacer lo mismo desde la aplicación del móvil. Automáticamente comenzará a verse en el móvil lo mismo que en la pantalla del ordenador, pero configurado para disfrutarlo mediante la realidad virtual.
TrinusVR en el dispositivo Android
Jugando a Xbox One en VR
¡Ya casi lo hemos conseguido! El último paso para disfrutar de los juegos de Xbox One es ir a la aplicación de Windows 10 y comenzar a hacer streaming desde la consola. Iniciamos un juego y lo veremos perfectamente desde el móvil colocado en las gafas de realidad virtual:
Evidentemente se trata de una experiencia algo limitada, sobre todo por la imposibilidad de recoger los movimientos de cabeza durante el juego y la calidad del vídeo, que dependerá tanto de la resolución de vuestro smartphone como de la de la pantalla del PC con el que hagáis la retransmisión. Sin embargo, se trata de una característica muy interesante que nos permitirá disfrutar, por poquísimo dinero, de un primer acercamiento a la realidad virtual en nuestra Xbox One. Y quién sabe, quizás algún día Microsoft de soporte a algo parecido.
Y vosotros, ¿habéis probado ya la realidad virtual en Xbox One? Coméntanos tu experiencia y, si tienes algún problema, utiliza los comentarios para pedir ayuda. Trataremos de echaros una mano en la medida de lo posible.
