Leslie Benzies, responsable de todas las entregas de la saga GTA desde GTA III y ex-presidente de Rockstar North demanda a la compañía y a sus antiguos compañeros Sam y Dan Houser. ¿El motivo? Un supuesto incumplimiento salarial y un despido improcedente. El documento al que hemos tenido acceso consta de 71 páginas y en él se especifican datos sobre la compañía y la manera de hacer de los hermanos Houser, creadores de la misma.
Como algunos recordaréis, en enero se hizo oficial que Benzies dejaba la compañía y que desde finales de 2014 se encontraba de año sabático. El documento presentado por los abogados añade información extra. A continuación tenéis un resumen del extracto donde se explica un poco de historia del demandante y la compañía y los motivos de la demanda. Obviamente el texto está escrito desde el punto de vista del demandante, nosotros no nos posicionamos a favor de nadie sólo intentamos traducir lo más textualmente posible el contenido del mismo.
Leslie empezó a programar con 11 años y a los 12 ya había creado su primer juego, ya de mayor centró su atención en la saga GTA y junto un pequeño equipo llamado DMA Design crearon GTA III, un juego que sentó las bases de los videojuegos actuales. DMA fue absorbida por Rockstar y pasó a llamarse Rockstar North con Leslie en la presidencia de la compañía gracias al éxito de GTA III. Leslie pasó a ser una pieza clave en Rockstar y lideró los siguientes Grand Theft Auto (Vice City, San Andreas, IV, V y GTA Online).
Sam y Dan Houser, fundadores de la compañía, no son tontos y viendo la habilidad de Leslie con los videojuegos lo «blindaron» y le ofrecieron un puesto en un grupo exclusivo de la compañía formado por los dos hermanos y el propio Leslie. Ese puesto implicaba un gran sueldo ya que se repartirían de manera equitativa un buen porcentaje de los beneficios de los juegos a partir de 2009.
Sam Houser y Leslie Benzies mantenían una gran relación y el primero no dejaba de enviarle correos al segundo animándole y apreciando su trabajo. Benzies cambió la manera de trabajar de Rockstar y aportó nuevas ideas para desarrollar juegos que se acabaron convirtiendo en señas de identidad, llegando a liderar en cada iteración de la saga GTA grupos de más de 900 personas.
Leslie también servía como recurso a Rockstar. Pese a encargarse solamente de la saga Grand Theft Auto muchas veces los hermanos Houser recurrían a él para solucionar problemas. Uno de esos casos se dio en Red Dead Redemption. Tal y como reconoció Sam Houser, los hermanos eran incapaces de completar grandes y complejos mundos sin la ayuda del señor Benzies. Los Houser fueron los líderes del desarrollo de Red Dead Redemption mientras que Leslie no tenía ningún rol asociado a ese juego. A medida que la fecha de entrega llegaba Sam intentaba ponerse en contacto con Leslie, en un e-mail del 22 de octubre de 2009 Sam escribía «Las subidas y bajadas son extremas. Debemos solucionar esto. ¡Rápido! Me estoy volviendo loco», al día siguiente le volvió a escribir «Este juego es una pesadilla pero debo/debemos superarla. Tengo problemas con la cámara por todas partes. Tanto que no puedo especificar o ser racional sobre ello. ¡¡¡La oscuridad!!!». Al día siguiente el correo era aún más exagerado «POR FAVOR ayúdame/nos para pulir RDR. Me están temblando los dientes y todo, necesito a The Benz!». Una vez Benzies entró en producción el juego consiguió su nivel en pocos meses, estando disponible para presentarlo a Sony y Microsoft.
Sam Houser se acabó centrando más en los negocios de la compañía dejando casi toda la responsabilidad en la dirección y desarollo de juegos a Leslie Benzies. Los 3 se convirtieron en grandes amigos, siendo siempre Sam una persona que no se cansaba de elogiar a Benzies. Sam llegó a nombrar a Leslie Padrino de su hijo.
El ‘Royalty Plan: 2009’ se realizó en dicho año debido al éxito de GTA III, Vice City, San Andreas y IV. Consistía en repartir de manera equitativa un alto porcentaje de los beneficios de los juegos que lanzaría Rockstar en el futuro. Aunque también se creó por si cabía la posibilidad de que los 3 altos cargos decidiesen abandonar la compañía. Fundaron un estudio independiente llamado «Another Game Company» que no estaba ligado a Rockstar y que serviría a los 3 para trabajar en licencias de Take-Two gracias al dinero de Royalty Plan.
En Resumen: Leslie y los hermanos Houser firmaron un acuerdo que les aportaría grandes sumas de dinero y acordaron un «Plan B» en el que dejaban la compañía y formaban un estudio independiente gracias a ese dinero y se aseguraban trabajar en IP’s de Take-Two.

(De izq. a der.): Aaron Garbut, Sam Houser, Dan Houser y Leslie Benzies
Leslie estuvo al cargo de GTA Online y dado que Sam Houser (cuyo nombre siempre aparece el último en los créditos de inicio) no le daba mucha importancia al título decidió que su nombre debía ser el último. Sam no se dio cuenta de ello hasta que el juego salió al mercado lo que significaría que no jugó ni vio el juego antes de su salida -o sino lo habría visto en los créditos de inicio. Sam se cabreó y llegó a decir según una directiva de la compañía que «Leslie quería hacerse con la compañía».
El 29 de julio de 2014 Sam citó a Leslie en las oficinas de la compañía de Nueva York para comunicar a Leslie que debía tomarse un tiempo libre. Algo lógico pensando que la compañía no tenía grandes juegos en el futuro así que Leslie aceptó para así pasar más tiempo con los suyos. El acuerdo se firmó el 15 de agosto de 2014, Leslie aceptaba tomarse un «año sabático» hasta el 31 de marzo de 2015. Durante ese tiempo, Leslie seguiría cobrando sin excepción alguna.
Pronto ese año sabático se convirtió en una expulsión. El teléfono de la compañía de Leslie ya no estaba operativo, su correo tampoco, Sam despidió a compañeros cercanos a Leslie. Benzies no tenía permitido contacto alguno con miembros de Rockstar ni acceso a ningún tipo de dato de la compañía. Desde entonces Leslie no recibió la parte de su Royalty Plan y los hermanos se repartían su parte de los más de $523,000,000 de beneficio que consiguió el juego. Leslie intentó volver a la compañía pero los hermanos Houser intentaron de todas las maneras posibles que no se incorporase el 1 de abril de 2015, viajando hasta Edimburgo, sede de Rockstar North para hablar con sus compañeros sobre el tema.
Leslie intentó llegar a su trabajo el 1 de abril. El guardia del edificio le reconoció y entró pero ahí el manager de la oficina le pidió que marchase. El 2 de abril el abogado de Benzies comunicó a Rockstar y Take-Two que su cliente dejaba la compañía y que tomaría acciones legales.
Es por ello que Leslie Benzies demanda a Rockstar y Take-Two por los daños causados y pide 150 millones de dólares.
Take-Two y Rockstar han publicado una contra-demanda en la que comunican que intentaron agotar las vías de diálogo con el señor Benzies y que todo esto se solucionará en un juzgado. La compañía piensa demandar por daños y prejuicios.