A finales del pasado mes de enero nos encontramos con la noticia de que Microsoft había anunciado el despido de cerca de 2.000 personas tras la adquisición de Activision Blizzard King. Aunque el silencio primó en las primeras horas, posteriormente personas como Matt Booty salieron a dar la cara, explicando que gran parte de los despidos producidos fue por la «duplicidad de puestos» que existía entre los diferentes equipos de Xbox Game Studios, Bethesda y Activision.
Unas semanas después de lo sucedido, algunas voces discordantes con la decisión señalaron si no sería posible que estos despidos de Xbox hubieran podido ser evitados en gran medida si Phil Spencer y el resto del equipo directivo de Xbox hubiera tomado la decisión de reducir su sueldo, tal y como ya ocurriera tiempo atrás con otros grandes directivos como Satoru Iwata (a través de 3DJuegos). Sin embargo, ¿habría sido realmente efectiva esta medida?
Los despidos de Xbox no habrían podido evitarse por la bajada de sueldo de Phil Spencer
Según los datos más recientes, el salario estimado de Phil Spencer por ser CEO de Xbox es de unos 10 millones de dólares al año. Como es lógica, esta cifra ha dado lugar a debate sobre si una posible reducción de su salario, así como el de parte de la junta directiva de la compañía, habría evitado los múltiples despidos de Xbox. Es cierto que este tipo de prácticas suele ser realmente popular de cara tanto a los empleados como los usuarios, ya que demuestra una implicación a todos los niveles para lograr mantener unido a todo el equipo. Sin embargo, a efectos de números, son poco efectivos.
Aunque no son datos exactos, se establece que el salario medio de un trabajador de Xbox en Estados Unidos es de unos 100.000 dólares al año. Tomando como base esta cifra, que Phil Spencer hubiera rebajado a la mitad su salario a la mitad habría salvado «solamente» 50 puestos de trabajo. Es cierto que si el resto del equipo directivo de la compañía hubiera tomado la misma decisión, es posible que la cifra se elevara a los cientos de puestos, pero aun así estarían realmente lejos de los 1.900 despidos que se produjeron a finales de enero.
En el caso de grandes compañías como Microsoft, también es importante señalar que gran parte del salario de sus directivos viene directamente de la cantidad de acciones que poseen de la misma. Por eso, la bajada de su salario base tampoco tendría el auténtico impacto que hemos mostrado con el ejemplo anterior. Como hemos dicho, sería una decisión que podría tranquilizar a la gente que teme por su trabajo, pero a efectos económico, lo cierto es que no tendría una gran repercusión.

Precisamente esto último es lo más importante del asunto. Cuando Microsoft y otras grandes compañías, así como estudios de videojuegos más pequeños, anuncian despidos, se debe principalmente a que el objetivo económico del año no se ha cumplido (salvo en cuestiones excepcionales como la actual), deben aligerar masa salarial para evitar perder la viabilidad económica de la empresa.
Por tanto, la conclusión final que queremos dejar clara es que, la decisión de bajar el sueldo en una empresa tan grande como Microsoft no habría evitado los miles de despidos de Xbox (englobada como Bethesda y Activision). No obstante, sí que es cierto que, en el caso de empresas que han tomado esta decisión, la viabilidad económica de la misma suele ser mejor a largo plazo, especialmente debido al aumento de la autoestima e implicación de los trabajadores, que consideran que no tienen el peligro de perder sus puestos de trabajo.