No es un secreto para nadie que en CD Projekt Red van sobrados de talento en cuanto a narrativa se refiere y que, gracias a ello y a su desempeño, el estudio polaco logra contar historias increíbles en sus juegos de rol. Pero también les gustan los guiños y las sorpresas. Y es que un misterioso easter-egg (o huevo de Pascua) ha sido descubierto en The Witcher 3 next-gen en el bastión en ruinas de Velen.
En esta zona, bien conocida por aquellos jugadores que hayan ido a buscar los diagramas para fabricar la armadura de la Escuela del Oso, tiene tres ruinas más pequeñas alrededor, y cada una de ellas tiene un interruptor en una de sus paredes. Dichos interruptores no estaban presentes en la versión original del juego, tal y como podéis ver a continuación:
El «huevo de Pascua» de The Witcher 3 next-gen y Cyberpunk 2077
El easter-egg funciona de la siguiente manera. Al activar los tres interruptores, aparece un elemental de tierra y al derrotarlo, se abrirá un portal en la cima de una colina cercana. Caminar hacia el portal lo activa y moverse hacia él te lleva a la parte superior del bastión.
La única forma de ir desde aquí es bajar a un sótano en el que hay espectros inmortales que hay que esquivar hasta llegar a dos cristales inactivos que deben activarse con la señal Aard. Al activar los cristales, se abre un gran portal verde y moverse a través de él te permite salir de la torre.
La habitación con los cristales inactivos tiene un símbolo misterioso en una de sus paredes. Se trata del mismo símbolo presente en una estatua de Cyberpunk 2077, tal y como muestra esta captura:
No es la primera vez que se conectan estos dos universos, pero por el momento se desconoce cómo este misterioso símbolo vincula a The Witcher 3 next-gen con Cyberpunk 2077. Su presencia en ambos títulos de CD Projekt Red muestra indicios de que algún tipo de misterio está aún por resolver.