A finales de 2017, Ubisoft reveló su última y quizás más innovadora sucursal: Ubisoft La Forge. Con sede en Montreal, su propósito es cerrar la brecha entre los estudios de juego reales de Ubisoft y las unidades de investigación en universidades como UQAM, McGill University y Concordia University. Este nexo de colaboración tiene como objetivo producir avances en varios campos que pueden resultar beneficiosos tanto para los científicos como para la compañía gala para sus futuros productos.
Según el vídeo oficial publicado en el canal de Ubisoft La Forge en YouTube, la eliminación de errores en los títulos de triple A puede representar hasta el 70% de los costos de desarrollo. Eso es exactamente lo que Commit Assistant intenta solucionar gracias a las «últimas técnicas de aprendizaje automático y big data». La IA analiza todos los errores, también los de proyectos pasados, de la gran cartera de versiones anteriores de Ubisoft, y le asigna una firma única a cada uno. Luego, cuando se presenten nuevas contribuciones de código al Asistente de confirmación, el software comprobará si se trata de un error y, en caso de que se reconozca como tal, se generará una alarma.
Eso no quiere decir que no se producirán falsas alarmas, es algo que va a pasar, pero a medida que se agreguen nuevos errores, el Asistente de Confirmación mejorará con estas técnicas la eficacia del sistema. Pero no solo se pondrá a reconocer errores, sino que también sugerirá mejoras y soluciones a los programadores para una «resolución rápida». En general, Ubisoft estima que puede liberar hasta un 20% del tiempo de los programadores, lo que luego puede emplearse para mejorar las características en lugar de eliminar los errores. Puedes ver el vídeo completo, a continuación: